En 2012 me entregan el cuidado unilateral de mis tres hijos, y esto fue más o menos tranquilo hasta 2016, donde en un régimen de visita que le entregan a la madre, después de tres años sin contacto, porque ella, Andrea Vázquez, no se sometía a las pericias psiquiátricas que le han dado mal, le da una psicopatía narcisista, y cuando le entregan para hacer el régimen de visita, en uno de ellos le hacen decir a uno de mis hijos, que en ese momento tenía seis años, que yo le tiraba del pelo, entonces con esa excusa no volvieron, y desde ese día no los volví a ver más a dos de mis hijos.
De ahí el Poder Judicial hace esto, que en mi caso paralizó mi vida, porque perdí dos hijos que no vi nunca más hasta el día de hoy. Esta mujer, al no devolver los hijos en el régimen de visita, apela y recién la apelación es resuelta en agosto de 2016, donde la Cámara de Apelaciones dice, "ok, que se resuelva y que reintegre los menores por la fuerza pública", y como recurso, instruido por el abogado de ella en ese momento, Juan Pablo Gallego, que estuvo en el caso Grassi, al día siguiente a mí y a mi hijo nos hacen una demanda de abuso sexual agravado por el vínculo, para detener el reintegro. Fijate la gravedad de esto.
- Hay un proyecto que impulsa la legisladora Carolina Losada, contra las falsas denuncias, que tiene un aspecto que no sé si desde tu situación de víctima de una falsa denuncia podés comprender que lo que lo que se discute es que no haya un solo culpable declarado culpable que sea inocente, pero que esto no genere la contracara de no creerle a las verdaderas víctimas, ¿me explico, Pablo?
Sí, lo que pasa es que hoy hay toda una ideología de género instruida en el Poder Judicial, donde de movida la palabra de una mujer se toma como un hecho, entonces los hombres estamos en una clara desventaja ante esto, y por eso yo estoy comprometido con el proyecto de Losada y con todos los proyectos que se hagan con respecto a las falsas denuncias, porque hoy no somos iguales ante la ley ante una denuncia de una mujer.
Yo aparecía como el violador y mis hijos como víctimas, sin un juicio previo; aparecía en los canales, Mariana Fabbiani me denostó en la tele. Y no puede ser gratis para todos, para los periodistas, para mi vida, porque con esto han destruido mi vida y la de mis hijos con una falsa denuncia de alguien enfermo.
- ¿Qué tendría que cambiar para vos en el proceso cuando se produce una denuncia por violencia o por abuso? ¿Qué debería haber cambiado: más pericias, otro tipo de investigación?
Las cosas que tienen un origen en cuestiones de familia, tienen que ser tratadas primero pidiendo una pericia médico forense legal a ambos progenitores y al grupo familiar, y después ver qué pasa con lo penal, porque acá el imputado fui yo, entonces a la madre se la corrió de todo tipo de pericia. A mí me pusieron prisión preventiva por riesgo de fuga cuando nunca en mi vida tuve una denuncia. Entonces, la valoración de quién hace la denuncia es fundamental en esto, y también lo de penalizar. Acá, como no pasa absolutamente nada tras una falsa denuncia, es un recurso muy utilizado por las mujeres para privar a los padres de ver a sus hijos.
- Más allá de ser el protagonista de esta historia y de haber sufrido las consecuencias de esta falsa denuncia, no estamos viendo que aquella persona que formula una falsa denuncia no sólo está provocando daño a esas personas falsamente denunciadas, sino a todo el sistema judicial que se empieza a contaminar de esto.
Sí, sin duda, y ahí es donde pierden las verdaderas denuncias de abuso, por la contaminación con este tipo de cuestiones. El tema es que hay un comercio con esto, donde están involucrados abogados, médicos forenses, peritos, hay todo un sistema organizado para la falsa denuncia, aunque ustedes no lo crean.
En mi caso, cuando yo tenía en forma unilateral el cuidado personal, las abogadas del niño no tenían el menor contacto conmigo, eran simplemente con mis hijos. La doctora Edith Puente, que es la abogada del niño en su momento, de mi hijo Tomás, y ahora de mi hijo Nacho, convive con Vázquez, que es la madre de mis hijos, tiene una relación de convivencia, y esto no puede ser, porque imagínate que ahora que Tomás dijo esto, la abogada de él, Edith Puente, lo increpó diciéndole si yo no le había pagado para cambiar el diagnóstico, y amenazándolo con que yo le iba a hacer una denuncia a mi hijo de falso testimonio, si no presentaba un escrito contra la Corte Suprema para apelar. Es terrible como manipulan, no solamente la madre, sino el entorno.
- El fiscal desistió de acusar por falta de elementos. No solo fuiste absuelto en el juicio oral, sino que se levantó la acusación. Acá estamos tomando la parte de la justicia, que así como se equivocó al acusar previamente, directamente lo absolvió, ahora el tema lo has dejado planteado, ¿cómo te devuelven tu vida, tu buen nombre, tu prestigio profesional, cómo te devuelven la carnicería que a veces hacemos en los medios de comunicación con estos temas?
Es un trabajo interior el que uno tiene que hacer porque no puede quedarse con este veneno, y por eso que yo no insté más nada, y la verdad que sigo con esto porque creo que es un deber social, y no quiero que haya más Pablos Ghisoni, y acá las víctimas reales, aparte de mi persona, son mis hijos, y los hijos de tanta gente, esas son las víctimas.
Mi intención con esto es que salga esta ley y que, de alguna manera, disminuyan estas imputaciones falsas que hacen tanto daño, porque no es a una persona, es a toda una familia; esto arrasa a padres, abuelos, tíos. Mis padres no vieron más a sus nietos, hay hijos que perdieron contacto con su padre.
Yo me voy a encontrar ahora con Tomás, una persona que no veo desde que él tiene 13 años, es otra persona, Nacho, no lo veo desde que tiene 6 años y hoy tiene 16. Hoy en día sigo teniendo un perímetro con mi hijo, me quitaron la patria potestad, no puedo pedir ni saber cómo está de salud, cómo le va en el colegio, porque dicen que la sentencia no está firme.
Fuente: Cadena 3