Lo mataron el 3 de diciembre de 2022. La causa tiene una sola imputada, que está en libertad.
Rojas. Al ministro le debieron realizar dos autopsias.
El 3 de diciembre de 2022, Juan Carlos Rojas fue asesinado de manera brutal. Para la fecha, él era ministro de Desarrollo Social en funciones. El homicidio se perpetró en su casa, ubicada en la zona norte de la ciudad Capital. A tres años del crimen, la Fiscalía todavía no pudo capturar a la o las personas que ultimaron a “Rojitas”.
En el arranque de la investigación, se detuvo e imputó a Silvina Nieva. Ella era empleada de Rojas, pero además una mujer con la que mantenía un vínculo sentimental. El fiscal de Instrucción Nº 2, Laureano Palacios, fue el primer investigador que tuvo la causa. Él acusó a Nieva por el delito de “homicidio doblemente calificado por mediar relación de pareja y alevosía”. Pero también es cierto que en ese pasaje de la investigación, el fiscal de Instrucción Nº 5, Hugo Costilla, ya estaba acompañando a Palacios en la pesquisa. De hecho, ambos estuvieron en la indagatoria de Nieva.
La detención de Nieva duró una semana. Esto se debió a un error de Palacios. La falla consistió en que el fiscal no había firmado la orden de detención de Nieva. Esta falla fue advertida por el juez de Control de Garantías Nº 3, Lucas Vaccaroni. Una vez que Vaccaroni tomó nota de esto, decidió ordenar la liberación de Nieva, todo esto en diciembre de 2022.
La imputada y su defensa sostienen que ella es inocente y que no tuvo ningún tipo de participación en el crimen. Sin embargo, la Fiscalía mantiene la acusación que pesa sobre ella. Nieva está transitando el proceso en libertad, y a la espera de que se realice la reconstrucción del hecho. La defensa de Nieva tiene expectativas de que esta prueba pueda acercarla al sobreseimiento.
En la actualidad, el caso sigue a cargo de Costilla. Las líneas de investigación son varias y aún no son descartadas de manera definitiva. Esas líneas están relacionadas con vínculos sentimentales, familiares y laborales de Rojas. El viernes 7 de noviembre de este año, Costilla encabezó una nueva inspección en la vivienda de Rojas, con el objetivo de obtener material técnico para la reconstrucción tridimensional (Render) de la escena del hecho.
Durante la medida, una arquitecta y un agrimensor realizaron un relevamiento integral del inmueble, a fin de elaborar un modelo digital que permitirá recorrer virtualmente no solo el lugar en donde se halló el cuerpo, sino toda la propiedad y visualizar la ubicación exacta de cada indicio levantado durante la investigación.
El Render 3D funcionará como herramienta técnica y de análisis para el próximo ateneo interdisciplinario, permitiendo a los especialistas observar la escena desde una perspectiva interactiva, con íconos que marcarán los indicios relevados en las inspecciones previas realizadas y su correspondiente información pericial. De esta forma, se busca fortalecer la comprensión global de la escena y optimizar la exposición técnica de los hallazgos, superando las limitaciones de los registros fotográficos o esquemáticos tradicionales.
Esto también es una imagen del desarrollo del caso: variedad de pericias y escasez de resultados positivos. La realidad de la causa es compleja desde un inicio: debieron hacerse dos autopsias para que se confirme que se trató de un asesinato; hubo serios cuestionamientos a investigadores, peritos y policías que trabajaron en este hecho; los testigos declararon en varias oportunidades; la casa de Rojas fue inspeccionada en más de una ocasión; se hizo un jury en contra de Palacios, proceso del que resultó airoso el fiscal; se pidieron informes a la empresa Google, en Estados Unidos; además, se abrieron celulares y computadoras. Y en esta complejidad de la causa, el crimen sigue impune.
