En Catamarca, esta disciplina deportiva pasó de los primeros intentos en los 90 a consolidarse como un deporte con referentes nacionales e impacto social.
El rugby femenino habría surgido en Inglaterra, a fines del siglo XIX, pero recién se juega en Argentina en noviembre de 1985. Eran dos equipos integrados por mujeres cercanas a los jugadores (esposas, hijas, compañeras de escuela, etc.) Alumni y GEI RC. Sin embargo, la práctica femenina de este deporte no prosperó, por falta de rivales, apoyo institucional, y cierto sector crítico. Pasó una década, aproximadamente, entre idas y vueltas, para afianzarse definitivamente.
En el libro “El Rugby, Historia, rituales y controversias desde sus orígenes hasta hoy” (2024) Andrés Reggiani y Alan Costa comentan:
El rugby femenino ha cobrado mayor visibilidad y crece año a año; sin embargo, la resistencia que ha encontrado en la dirigencia y en la sociedad ha retrasado la presencia de nuestras rugbiers en las competencias a nivel regional; aun así, el compromiso y empuje de las jugadoras auguran un futuro prometedor (pág. 203).
De acuerdo con los autores, la problemática surge a partir de la integración de la mujer en un deporte, tradicionalmente, practicado por hombres. Catamarca, ha experimentado este proceso, en el período de tiempo de las últimas 3 décadas.
En los últimos años, nuestra provincia, ha sido un espacio vinculado al crecimiento del rugby femenino. De acuerdo con estadísticas inferidas de análisis de registros emitidos por clubes catamarqueños, en el último lustro, encontramos un considerable aumento de jugadoras en dicho deporte. Los datos fueron relevados de Catamarca Rugby y Los Teros Rugby Club (ambos, ubicados en la ciudad de San Fernando Valle de Catamarca) donde se concentran la mayor cantidad de jugadoras, de la provincia. Empero, también de clubes de departamentos del “interior” de la provincia: Hurones Rugby Club (Valle Viejo), Wiracochas Rugby Club (Belén), Incas Rugby Club (Tinogasta), entre otros.
El rugby femenino, sus orígenes en nuestra provincia
Hemos consultado distintas fuentes, y según los registros, damos cuenta de un partido de rugby (entre varones) en Catamarca, a principios de la década del ‘50. Posteriormente, se dieron otros encuentros, creaciones (y/o fundaciones) de clubes, vinculados a instituciones privadas educativas y/o culturales.
Pero la mujer logra integrarse, paulatinamente, recién desde 1995.
El primer club con accionar relacionado con el rugby femenino fue Los Teros RC, que inició sus prácticas con mujeres, en el año 2009. Su primer entrenador fue Mario Acevedo. Luego se sumaron otros equipos; Catamarca RC y Los Hurones RC.
Por otro lado, el primer partido se disputó en el tradicional Seven del Cabrito, en la ciudad de Recreo, entre Los Teros y Los Hurones. La victoria fue de las “Las Teritas” (Nombre del equipo femenino, perteneciente a Los Teros RC), por 49 a 0. Flavia Varela apoyó el primer “try” de la historia en el rugby femenino, en Catamarca.
En nuestra provincia, se destacaron, las jugadoras Julieta Salerno, Gimena Mattus (entre otras); ambas convocadas para jugar en el seleccionado argentino de rugby femenino, Las Yaguaretés. Las jóvenes tuvieron brillantes actuaciones, y mostraron su liderazgo dentro y fuera de la cancha.
Actualmente, la referente catamarqueña Virginia Brígido se destaca en el seleccionado nacional, distinguida (también) por su reconocimiento en todo el continente.
Vir, recientemente declarada Ciudadana Ilustre por el Concejo Deliberante de nuestra capital, es hija de María Liliana Chamorro (+2015) quien, a su vez, fue pionera en la inserción femenina en el referenciado deporte, y cofundadora del club Catamarca Rugby.
Anita Pacheco: la mánager
“El rugby es un deporte increíblemente completo desde el punto de vista deportivo y social. Influye positivamente en las mujeres ofreciendo una amplia posibilidad de integración, derriba barreras y estereotipos, contribuyendo a la igualdad de género”. (Ana Carolina Pacheco, 2025)
Hace unas semanas, el sitio internacional sportlandoffreedom.com compartió un artículo (que forma parte del proyecto llamado Rugby, l’Ottavo Continente) titulado: “Argentina: Jugar al rugby te da mucha más confianza en la vida.
En la publicación, Carolina Bravo (pionera del rugby femenino, en Argentina), expone el desarrollo y el impacto del rugby femenino en nuestro país, remarcando su impacto social y emocional en las mujeres que participan. Menciona la historia de este deporte, desde su primer partido en 1985 hasta su formalización por la UAR en 2004. A través de testimonios de jugadoras y entrenadoras, resalta cómo el rugby ha sido una poderosa herramienta de empoderamiento, promoviendo valores como la disciplina, el liderazgo y la pertenencia. Bravo también comparte su experiencia internacional en Siria, donde usó el rugby como medio de inclusión social en contextos vulnerables. Además, se incluyen entrevistas con figuras clave del rugby femenino argentino, quienes narran cómo este deporte transformó sus vidas.
El artículo hace referencia a nuestra Ana Pacheco, conocida como “Anita”. Destacada mánager de las categorías masculinas del club Catamarca Rugby y ex coordinadora del rugby femenino en la Unión Rugby Andina (que comprende las provincias de La Rioja y Catamarca).
Ana sostiene con firmeza que, el rugby trasciende lo meramente deportivo. Para ella, este deporte representa una vía poderosa de transformación social y empoderamiento femenino.
Desde su experiencia, afirma que “ayuda a forjar autoestima, confianza, disciplina y perseverancia, que reflejan el trabajo en equipo”. Estos principios no sólo fortalecen a las jugadoras, sino también a las comunidades que las rodean. El respeto y la lealtad “generan lazos de amistad para toda la vida”.
Apunta que, este deporte es un puente entre lo emocional y cultural “las mujeres portan experiencias, emociones y perspectivas únicas que enriquecen el deporte en modos que no podemos medir, pero sí vivir y transmitir”.
Anita viene impulsando, hace décadas, un cambio genuino en el rugby argentino. Su objetivo principal es lograr que la inclusión femenina sea una realidad cotidiana, natural y legítima dentro del deporte.
Una reflexión
El rugby femenino en Catamarca refleja un proceso de integración y empoderamiento que ha transformado vidas y comunidades. Desde sus inicios, este deporte ha crecido significativamente, derribando barreras sociales y culturales. Destacadas han llevado el talento catamarqueño al ámbito nacional e internacional. Además, figuras como Vir Brígido y Anita Pacheco, han promovido la inclusión y el impacto social del rugby, resaltando valores como la disciplina, el respeto y la confianza. Este deporte no sólo fomenta igualdad de género, sino también la construcción de lazos duraderos.
Texto y Fotos: Colaboración de Leandro Túa
Bibliografía y referencia
- Bravo, C. (2024). Argentina: giocare a rugby ti dàmoltapiù fiducia nella vita. Sport LandofFreedom. Recuperado de https://www.sportlandoffreedom.com/progetti/ottavo-continente/argentina-giocare-a-rugby-ti-da-molta-piu-fiducia-nella-vita/
- Pozzi, P. A., Mastrángelo, M., Vommaro, P. A., Nigra, F., Mazzei, D. H., Pisani, A., Carbone, V. L., López Palmero, M., Aptheker, H., Zinn, H., & Kelley, R. D. G. (2021). Haciendo historia: herramientas para la investigación histórica. CLACSO.
- Reggiani, Andrés y Costa, Alan (1991) “El Rugby. Historia, rituales y controversias desde sus orígenes hasta hoy”. Siglo XXI.
- Trenado, J. M. (8 de marzo de 2024). Sin bin: historia y castigo del primer partido de rugby femenino en la Argentina. LaNación. Recuperado de https://www.lanacion.com.ar/deportes/rugby/sin-bin-historia-y-castigo-del-primer-partido-de-rugby-femenino-en-la-argentina-nid08032024/