"Burgos transformó en bochorno, lo que debió ser una fiesta", sostuvo Gladys Moro, quien conduce el sector cegetista que no fue invitado al acto del que participaron el gobernador Raúl Jalil y el cosecretario general de la CGT Nacional, Héctor Daer.
"Como delegada de la CGT Regional Catamarca, repudio el accionar de Leonardo Burgos, secretario general de ATSA y mi par en la conducción de nuestra central obrera local; por su perverso y desleal proceder en el acto inaugural de la nueva sede para todos los trabajadores catamarqueños", reprochó en un descargo que publicó en su cuenta de Facebook.
"De esta forma, la ceremonia que hoy (por ayer) debió desarrollarse y concluir como una fiesta de todos los gremios de la provincia, terminó en un verdadero papelón por “obra y gracia” de Burgos y su entorno, que en todo momento obstaculizaron y hasta pretendieron impedir la presencia en dicho acto, de los dirigentes alineados en nuestro sector interno de la conducción cegetista", añadió.
A renglón seguido, Gladys Moro detalló: "Puntualmente, la compañera secretaria general de la UDA y secretaria adjunta de la CGT, Cra Nancy Aguero; la Cra Miriam Ramirez, sec. General de Taxi, como los compañeros Pablo Soria (Tribunal de Cuentas) y Jorge Toledo (AATRAC/Correo y Radio Nacional) fueron agredidos por allegados a Burgos, que pretendían negarles sus participaciones en tan emblemática circunstancia, de poder contar con la “casa propia” restaurada y recuperada para todos los sindicatos de la provincia".
"La compañera Nancy Agüero, fue impedida de sumarse al sector donde se encontraban el resto de los secretarios generales de gremios locales, por parte de Horacio Otero, empleado de la Secretaría del Interior de la CGT RA, quien incluso la amenazó 'denunciarla ante el secretario general de UDA, para que le llame la atención por haberse hecho presente en las instalaciones de la CGT Regional Catamarca'”, especificó.
"No entendemos nada, Sr. Otero…, ¿cómo van a impedirnos de ingresar a “nuestra casa”?", cuestionó.
"La Cra Ramirez quien fue con un bastón por razones de salud, fue impedida de pasar para ubicarse en un lugar más cómodo, con un destrato por parte de una señorita que responde a las órdenes de Burgos. Igualmente, el compañero Pablo Soria, quien conversaba con Burgos, fue violentamente apartado; como el compañero Toledo, en forma intempestiva fue agredido por personas del entorno de Burgos", acusó.
Gladys Moro sostuvo, a continuación, que lo sucedido durante el acto cegetista fue "una verdadera vergüenza". "A la vista de la máxima autoridad de la provincia, el gobernador Raúl Jalil, y el secretario general de la CGT de la República Argentina y del sindicato de la Sanidad, Héctor Daer, exhibiendo el perimido modelo patotero y autoritario de la conducción que el déspota Leonardo Burgos pretende mantener en la CGT Regional Catamarca".
"A la par de repudiar estos impresentables actos de violencia, me solidarizo con los compañeros gremialistas agraviados, y hago público mi pedido para que Burgos haga un paso al costado, permitiendo que, esas funciones, tan caras como necesarias para la defensa de los trabajadores de Catamarca, queden en manos de compañeros íntegros y comprometidos con la noble tarea sindical", finalizó.