Un terrible hecho de inseguridad se registró el jueves, a plena luz del día, en un kiosco ubicado en calle Junín al 200, a metros del Colegio de Odontólogos. La víctima, empleada y hermana del propietario, sufrió un corte en la cara.
Para continuar, suscribite a El Ancasti. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
Acceso hasta 40 notas mensuales en el portal de El Ancasti.
Para continuar, suscribite a El Ancasti. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
Acceso hasta 40 notas mensuales en el portal de El Ancasti.
Un terrible hecho de inseguridad se registró el jueves, a plena luz del día, en un kiosco ubicado en calle Junín al 200, a metros del Colegio de Odontólogos. La víctima, empleada y hermana del propietario, sufrió un corte en la cara.
En diálogo con El Ancasti, el propietario del kiosco relató que el jueves, a las 10, aproximadamente, un sujeto que conducía una motocicleta ingresó a local portando “sin ningún pudor” un cuchillo. El hombre -indicó- se acercó a la caja registradora y tomó el celular de su hermana, quien se encontraba trabajando en el kiosco. “Le pegó en la cara, ella tiene un corte en el pómulo, y la arrastró hasta la puerta”, dijo.
Fue en ese momento, -continuó- que su hermana pudo gritar para pedir auxilio. Los vecinos salieron a socorrerla; y el ladrón logró escapar: “Subió a la moto y se fue como si nada hubiera pasado”.
“Si esto está sucediendo a la mañana, con todo el movimiento que hay, no me imagino lo que puede llegar a pasar en otro horario”, cuestionó.