La abogada Rocío Grisel Gordillo, una de las imputadas en la causa de la banda de los usurpadores, está buscando la liberación.
Apeló la prisión preventiva que había dictado el juez Santiago Ahumada Franzini.
La abogada Rocío Grisel Gordillo, una de las imputadas en la causa de la banda de los usurpadores, está buscando la liberación.
Actualmente, está detenida en la Unidad de Mujeres N° 2. Esto se debe a que el juez de Control de Garantías N° 1 en comisión, Santiago Ahumada Franzini, dictó prisión preventiva en su contra.
La defensa de Gordillo apeló el dictado de la prisión preventiva por varias razones: consideraron que en estos hechos que investiga el fiscal de Instrucción N° 5, Hugo Costilla, no hay “asociación ilícita”; también plantearon que ella nunca participó en los sucesos delictivos y remarcaron que la Fiscalía no evacuó citas para corroborar si los dichos de Gordillo son ciertos o falsos.
Por otra parte, argumentaron que no hay riesgo procesal en caso de que ella recupere la libertad y discreparon con la imputación que le asignó Costilla. Además, indicaron que de los testimonios de los empleados judiciales surge la inexistencia de la “asociación ilícita” y de algún delito.
Gordillo es una de las sospechosas que declaró como imputada en la causa. En la oportunidad, mencionó a abogados que -según ella- trabajaban con los juicios ejecutivos de su pareja y líder de la banda, Mario Rodrigo Del Campo. Gordillo también contradijo al decreto de determinación del hecho que elaboró Costilla. En su declaración, explicó que en el año 2017, al momento en que se formó la asociación ilícita, de acuerdo con la teoría de Costilla, ella no conocía al resto de los imputados y no tenía ningún vínculo con ellos.
“En relación con el hecho que se me imputa, niego el mismo, en razón de que en ese año (por el 2017) yo me iniciaba en la profesión de abogada. No tenía conocimiento de todas estas personas, no las conocía, no tenía ningún tipo de vínculo”, aseguró Gordillo ante los investigadores.