Celulares: recomiendan regular y no prohibir el uso en las escuelas
Desde la pandemia, los dispositivos irrumpieron en la educación para convertirse en una herramienta útil.
Desde el Ministerio de Educación de la Provincia y también a través de un proyecto de ley se busca prohibir el uso de celulares en las escuelas. Ambas iniciativas han generado polémicas y posturas a favor y en contra de que los alumnos de todos los niveles educativos usen estos dispositivos durante el horario de clases.
Consultada por EL ANCASTI, la licenciada María Inés Cáceres, referente del área de Psicopedagogía del Hospital de Niños Eva Perón, comentó que, según su criterio, considera que los celulares se han convertido en una herramienta de trabajo en las escuelas por lo que implementar ciertas regulaciones resultará más productivo y constructivo que aplicar prohibiciones.
Cáceres señaló que se debería pensar en el cómo, cuándo y a qué edades se usarían estos dispositivos. “Puede ser en el aula, mediado por la palabra, con un límite en el uso para que sea solo como un recurso pedagógico y que desaparezcan, según mi criterio personal, de los recreos para que los chicos puedan volver a jugar y encontrarse con el otro”, ejemplificó.
En este sentido, la psicopedagoga resaltó que “sería ver cómo se flexibiliza con un sentido el empleo de estas herramientas que vinieron para quedarse en nuestra vida y hacer de un sistema educativo más moderno que se ajuste, pero que también ponga límites”.
La importancia de limitar o regular el uso de los dispositivos está relacionada con el valor que tiene la presencia del otro en la incorporación de saberes. “Aprender es siempre a partir del otro; no es una cuestión memorística y repetitiva, sino que aprendas a partir de la presencia del otro, o sea que el uso del celular tiene que siempre estar limitado porque para aprender tengo que compartir mi experiencia con el otro”, resaltó.
Entonces, según lo expresado por Cáceres, este compartir experiencias, es decir la vida social de los estudiantes, cobra un valor trascendental y se debe recuperar para que sus relaciones no estén mediadas por un dispositivo. “Porque a la escuela se va a aprender contenidos curriculares, pero también se va a aprender nuestras primeras vivencias en lo social”, dijo.
Niveles de atención
La psicopedagoga destacó que las consultas más frecuentes en los consultorios externos del Hospital de Niños Eva Perón están relacionadas con los niveles de atención de los niños, niñas y adolescentes dentro de las escuelas, y que esto está relacionado con la exposición a las pantallas.
Sin embargo, explicó que no se trata una patología, sino de un cambio que se está produciendo en estos niveles. “Tener la respuesta inmediata, el aburrimiento que muchas veces tienen los niños cuando se tienen que enfrentar al viejo método que mantienen todavía muchos docentes de la pizarra con la tiza y esperar 40 u 80 minutos que dura un módulo, a este inmediatez que tiene el celular que, por supuesto, es mucho más atrapante”, dijo.
“Los chicos y los adultos han cambiado los niveles de atención, manejan otro tiempo para atender y otro tiempo para la búsqueda de la respuesta. Quieren respuestas muchos más inmediatas, algo que satisface rápidamente las inquietudes y que no se vuelva monótono y aburrido”, finalizó.
Las iniciativas
Recordemos que son dos las iniciativas existentes que pretenden la prohibición de los celulares en los establecimientos educativos de la provincia.
Por un lado, el Ministerio de Educación, mediante una resolución de noviembre de 2022 establecía que se prohíbe la "utilización de teléfonos celulares y otros dispositivos tecnológicos análogos por parte de los/as alumnos/as que sean portadores/as y/o usuarios/as de aquéllos, en todos los establecimientos educativos de todos los niveles obligatorios de la provincia de Catamarca, abarcando tanto la Gestión Estatal como Privada, Cooperativa y Social".
Hasta el momento, esta idea no prosperó.
Por otro lado, la diputada provincial Stella Nieva presentó en agosto pasado un proyecto de ley que apunta a prohibir el uso de teléfonos celulares a los estudiantes en los establecimientos educativos de nivel primario, públicos y privados, en toda la provincia.
Entre los fundamentos de este proyecto se encuentran la distracción y molestias que provocan, además de restar eficacia al dictado de las clases, interrumpiendo de esa manera a alumnos y docentes, y produciendo por ende trastornos en el aprendizaje.
Por parte de los establecimientos educativos, solo el Colegio Quintana había expresado la voluntad de empezar a regular el uso de los dispositivos.