jueves 28 de marzo de 2024

Improvisación

Generalmente las personas piensan que es el arte de hablar de cualquier tema, sin conocimiento previo. Efectivamente es un arte, pero de hablar sin guión con un conocimiento profundo de lo que se habla que previamente, de una forma u otra, se ha adquirido o entrenado. Recuerden que nadie habla de lo que no conoce o al menos así debería ser.

La improvisación está íntimamente relacionada con la argumentación, y exige una preparación previa orientada a temas determinados. Es cierto que frecuentemente en alguna ocasión discursiva aparezca la necesidad de hablar de un tema que no tenías preparado, o puede ser que te pase que falla algo, de imprevisto un corte de luz, el proyector, el micrófono que no funcionan la computadora que se tilda, son situaciones que pueden suceder, muchas personas se estresan frente a estas circunstancias, te sugiero que utilices esta oportunidad a tu favor.

Cada ocasión como orador es una oportunidad para dar un salto hacia algo mejor, que te permite ampliar tus ideas y conceptos. Porque por si no lo sabían, hasta para improvisar hay que estar preparado. El objetivo es parecer que se está improvisando cuando en realidad lo que se está haciendo es argumentar desde un conocimiento previo que se ha adquirido.

La clave es confiar en nosotros mismos, cuando una persona ama su producto y confía en él o en la empresa que representa, lo que produce es que las palabras sobran, salen solas. Agregándole un tono de voz firme, contundente y con una comunicación no verbal cada una de sus palabras de manera asertiva, la gente considera que eso que expone es cierto y real.

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¡Hasta el próximo domingo!

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