Axel Kicillof participa de la marcha al Congreso para apoyar el rechazo al veto a la reforma jubilatoria
Diferentes organizaciones protestan frente al Parlamento Legislativo mientras en Diputados debaten si aprueban o rechazan la medida firmada por Javier Milei.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof encabeza este miércoles la columna bonaerense que marcha hacia el Congreso de la Nación para apoyar el rechazo al veto a la reforma jubilatoria tratado en la Cámara de Diputados y en medio de un clima de máxima tensión en las calles por la aplicación del protocolo antipiquetes por parte de las fuerzas de seguridad.
Bajo una bandera con la frase “La Patria no se vende” el mandatario bonaerense estuvo acompañado por la vicegobernadora, Verónica Magario, los ministros Gabriel Katopodis, Carlos Bianco, Andrés Larroque y los intendentes Jorge Ferraresi (Avellaneda), Mario Secco (Ensenada) y Federico Achaval (Pilar).
“Lo único que quiero decir es que los recursos de esta ley, lo que vetó Milei, es equivalente a los impuestos que le perdonó a los más ricos de la Argentina cuando cambió bienes personales", señaló Kicillof en medio de la movilización en una entrevista compartida por el periodista de C5N Lautaro Maislin en su cuenta de X.
"Acá no hay un problema de si hay plata o no hay plata, sino para qué se usa y a quién se beneficia”, agregó el gobernador de la provincia de Buenos Aires.
Tensión en las afueras del Congreso: se activó el protocolo antipiquete para blindar las inmediaciones
Efectivos de las cinco fuerzas despliegan un gran operativo para controlar las calles y evitar el avance de jubilados y manifestantes. Se especula que se acercarán unas 10.000 personas para participar de la movilización, donde solicitan el rechazo al veto de Javier Milei.
Desde muy temprano, la zona se encontraba preparada con un operativo de seguridad especial dispuesto entre la Ciudad de Buenos Aires y un amplio despliegue de las fuerzas: miles de policías de la Federal, sumados a vallados en las calles linderas y camiones hidrantes se dispusieron en las inmediaciones del Palacio Legislativo.