Don Ladislao Llauco Carrizo fue uno de los últimos grandes arrieros y baqueanos que recorrieron la Cordillera de los Andes y el cordón de San Buenaventura. Junto a su familia, los Llauco, transportaban animales, granos y tejidos a través de rutas ancestrales como la Quebrada de La Troya y el paso por Cienaguitas hacia San Antonio de los Cobres y Calama, en Chile. Con un profundo conocimiento del Qhapaq Ñan -el antiguo camino inca utilizado para transitar la montaña-, los Llauco protagonizaron incontables travesías que hoy sobreviven en la memoria oral. Muchas de esas historias, sin embargo, ya se han perdido con el paso del tiempo.