Los padres de una niña de 14 años denunciaron que un hombre de 36 años aproximadamente, abusó sexualmente de ella, luego de establecer un vínculo de amistad con la familia, en el departamento Valle Viejo.
Era compañero de trabajo del progenitor de la víctima. La indujo a ir a su casa con mensajes de texto primero y luego, con amenazas.
Los padres de una niña de 14 años denunciaron que un hombre de 36 años aproximadamente, abusó sexualmente de ella, luego de establecer un vínculo de amistad con la familia, en el departamento Valle Viejo.
Según la información a la que pudo acceder El Ancasti, el sospechoso habría sometido varias veces a su víctima con amenazas de informarles a sus padres sobre lo sucedido.
El último hecho fue registrado a principio de julio. Tras la denuncia penal se dio intervención a la Fiscalía de Violencia Familiar y de Género a cargo de Ruth Alejandra Antonino, quien ordenó las primeras medidas a cumplimentar.
El hombre fue arrestado, imputado e indagado por abuso sexual con acceso carnal y liberado con la imposición de fuertes restricciones, a la espera de los resultados de la entrevista que próximamente se le hará a la adolescente en Cámara Gesell.
Según los primeros testimonios y pericias preliminares, el acusado era compañero de trabajo del progenitor y tenía domicilio a pocas cuadras de la vivienda de éste.
A partir de esa relación laboral y la cercanía vecinal, a fines del año pasado comenzó a frecuentar la casa del progenitor y por consiguiente, a su grupo familiar.
La relación derivó en el intercambio de números telefónicos con los progenitores y sus hijos, y el envío de mensajes a través de las redes sociales. Con mentiras y aprovechando la inmadurez de la joven, el hombre la indujo a través de mensajes a que una noche concurra a su domicilio, ubicado en las cercanías. Confiando en que no corría peligro, la chica fue a la cita.
El hombre la hizo pasar a su casa y luego de una breve conversación, le dijo que le gustaba, que quería mantener relaciones sexuales con ella y comenzó a realizarle tocamientos. La joven se resistió y el sujeto la dejó ir.
Con este antecedente, el sujeto la volvió a contactar por teléfono y bajo amenazas de que relataría a sus padres lo que había pasado aquella noche, en que ella fue a su casa, la forzó a que concurra una vez más y la chica accedió. Una vez más, la hizo entrar a la casa y tras cerrar la puerta con llave, la redujo, la abusó sexualmente y la dejó ir, siempre con amenazas de que si contaba algo a alguien, él la delataría con sus padres.
Los ultrajes se repitieron en varias jornadas hasta que, la última vez, un familiar advirtió que la joven no estaba durmiendo como era habitual y alertó al resto de la familia.
Los progenitores sospecharon que el compañero de trabajo podría saber algo sobre su paradero y fueron a su casa, donde lo sorprendieron en compañía de la menor de edad.
Tras una fuerte discusión el hombre fue reducido y entregado a efectivos policiales. Se radicó la denuncia penal correspondiente y se activaron los protocolos para casos de abuso sexual. En un primer momento la investigación estuvo en manos del fiscal Laureano Palacios, quien luego derivó el expediente a la fiscalía especializada.
Todas las denuncias pueden ser efectuadas en cualquier unidad judicial del Valle Central o en las fiscalías y comisarías del interior provincial. En todos los casos quien escriba la denuncia tiene la obligación de entregar copia o foto del escrito.