Los incendios forestales en California tomaron por sorpresa a miles de residentes en el área de Los Ángeles, dejando un saldo de al menos cinco muertos y 100 mil personas evacuadas.
Los incendios forestales en California tomaron por sorpresa a miles de residentes en el área de Los Ángeles, dejando un saldo de al menos cinco muertos y 100 mil personas evacuadas.
Estas intensas llamas, alimentadas por una combinación de sequía extrema y vientos que alcanzan los 112 km/h, llevan consumidas más de 10.000 hectáreas en diferentes puntos de la región. Las imágenes de casas reducidas a cenizas y evacuaciones masivas muestran la magnitud de la emergencia que enfrenta el sur de California.
Las causas de esta tragedia apuntan a una peligrosa combinación de factores naturales y climáticos. Según Inside Climate, una organización especializada en periodismo ambiental, el sur de California tuvo menos del 10% de las precipitaciones habituales desde octubre. A esto se suman los fuertes vientos de Santa Ana, que actuaron como un poderoso combustible.
Estos cambios extremos entre sequías prolongadas y lluvias torrenciales reflejan el impacto del cambio climático. Estas condiciones no solo dificultan el control de los incendios, sino también la recuperación de las comunidades afectadas.