Un hombre no quería quedarse afuera del Ice Bucket Challenge y como llegó un poco tarde decidió hacerlo de una manera sorprendente: con una grúa que tenía la pala cargada de agua. El problema fue que la persona que manejaba la pala no lo tenía muy claro y, primero, la bajó, golpeó y tiró al piso al hombre y como si fuera poco después le descargó el agua.