Si bien para la segunda mitad del año los trabajadores de la sanidad y el Gobierno habían acordado abrir una nueva paritaria, un sector convoca a un quite de colaboración para la próxima semana y, por su parte, un gremio ya tuvo una primera reunión para negociar un aumento.
José Traverso, referente de los Autoconvocados de la Salud, informó que el próximo 8 de septiembre se realizará un quite de colaboración. Ayer al mediodía se presentó la nota correspondiente en el Ministerio de Salud. El sindicalista precisó que, de acuerdo con la nota presentada el 12 de agosto pasado, se solicitaba un incremento salarial en el orden del 20 %, el nombramiento de precarizados y la recategorización de los trabajadores.
El referente sindical adelantó que para el día de la medida de fuerza se suspenden las cirugías programadas, no se atenderá en consultorios externos ni tampoco a pacientes del interior con turnos programados. Solo se atenderán urgencias, emergencias y a los pacientes internados.
"Todos los servicios realizarán un quite de colaboración. Hay mucho malestar entre los trabajadores. Desde mayo estamos sin medidas de fuerza. No cumplen con lo acordado para negociar. Avisamos con tiempo sobre la medida de fuerza, para que las autoridades garanticen las guardias mínimas”, indicó.
Por su parte, Leonardo Burgos, secretario general de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA), comentó que hace 20 días se abrió la paritaria con los Ministerios de Salud y de Hacienda y Finanzas. También remarcó que hubo una reunión con las autoridades de la cartera sanitaria, la cual realizaría una convocatoria a la cartera económica para negociar el nuevo incremento salarial. Según Burgos, no se estableció ningún porcentaje inicial para comenzar a negociar sobre aumento. No obstante, recordó que en el acta firmada el 26 de abril último, se acordó que si la inflación superaba el 40 %, se abriría una nueva paritaria. Dado este aumento, el mes pasado se retomó la negociación por un nuevo incremento salarial.