La villa veraniega Las Pirquitas (Fray Mamerto Esquiú), sigue siendo una de las opciones elegidas para vacacionar por muchas familias que optan por el turismo interno. Sin embargo, a poco de haberse reinaugurado su camping que está emplazado a la orilla del río del Valle, surgieron las denuncias y las quejas de los veraneantes, que se sorprendieron por los costos que tiene poder acceder a éste.
A pesar de ser un predio que es administrado por la municipalidad, las autoridades de aquella decidieron cobrar entrada y un monto adicional por cada uno de los servicios, lo que implica un gasto enorme para una familia tipo (cuatro personas), que debe contar con aproximadamente $2000, para ingresar, estacionar y utilizar una parrilla.
El ingreso para mayores de 12 años se cobra $500, para menores $300. A esto debe sumarse el estacionamiento de camioneta $300, auto $200 y motos $100. El derecho de uso del asador es de $200, el alquiler de reposeras cuesta $300 y el alquiler del quincho $ 4000.
“Cobran la entrada y los servicios como si fuese un camping privado cuando es de la municipalidad y es atendido por empleados. Nos parece excesivo porque una familia debe contar con por lo menos $5.000 teniendo en cuenta el combustible para movilizarse, la entrada por persona, el alquiler del asador y el estacionamiento, esto sin contar si vamos a alquilar sillas o comprar allí las comidas y bebidas”, expresó una mujer que desde la Capital se trasladó junto a su familia para pasar el día en aquella apacible villa veraniega.
“Nos parece caro porque no es el gran camping, es común y corriente, con unos pocos servicios que si no llegamos temprano para ganar una mesa o parrilla, nos quedamos sentados en el piso pagando igual la entrada”, manifestó otro veraneante.