domingo 15 de junio de 2025
Lo aeguró el fiscal de Cámara Alejandro Dalla Lasta Baroni

"Hubo más que negligencia; hubo riesgo al manipular un arma"

Se inició el juicio popular por la muerte del policía Ramírez. La defensa aseguró que el acusado no tuvo intención.

“Las armas de fuego no fueron creadas para jugar ni tampoco para no ser respetadas. Fueron creadas para destruir, aniquilar y dañar”, dijo el fiscal de Cámara Alejandro Dalla Lasta Baroni, en su alegato de apertura. El banquillo de los acusados es ocupado por Franco Emanuel Ávalos, quien debe responder por el delito de “homicidio simple con dolo eventual calificado por el uso de arma de fuego”. El debate se desarrolla en la sala de la Oficina de Gestión de Audiencias (OGA) del Poder Judicial.

La jornada se inició con la audiencia de selección de jurados –también conocida como audiencia de Voir Dire-. Doce vecinos de la Capital, seis hombres y seis mujeres fueron seleccionados. El juez director Fernando Esteban impartió las instrucciones iniciales a los jurados.

El hecho por el que Ávalos fue imputado sucedió el 2 de junio de 2023 en el edificio del Grupo de Infantería Motorizada de Acción Rápida (GIMAR), ubicado en la Capital. Ocurrió al momento en que Ávalos manipulaba un arma de fuego, según la investigación. Su compañero Oscar Ramírez falleció tras recibir un impacto de bala de goma en la cabeza. Desde entonces, Ávalos está privado de la libertad en el Servicio Penitenciario Provincial (SPP) de Capayán. Durante la investigación, Ávalos reconoció que le disparó a Ramírez. “(…) Yo, encontrándome parado frente al escritorio, plenamente seguro de que el arma estaba descargada, y a modo de broma, la chimacié y efectué el disparo. En ese momento, sentí el estruendo de la escopeta y quedé en shock”, relató. Luego, el policía remarcó que tras esa situación lo único que hizo fue “dejar la escopeta en la mesa”.

Luego de los alegatos de apertura, se escuchó a la primera ronda de testigos. El debate abrió con el alegato del fiscal de Cámara Dalla Lasta Baroni. “En este juicio no se va a discutir que Ávalos mató a su compañero, eso quedó probado. Se va discutir cuál es el encuadre legal, según la conducta que realizó Ávalos contra Ramírez, para matarlo”, aclaró.

Además, remarcó que los policías de este grupo especial son personas “altamente capacitadas para ejercer su función y fundamentalmente se los capacita en el manejo de armas porque eventualmente pueden usarlas. El señor Ávalos, con su accionar, por una parte, desoyó sus capacitaciones como policía con relación al manejo de armas”.

El representante del Ministerio Público Fiscal aclaró que no hubo intención directa pero sí hubo dolo eventual para ocasionar la muerte de Ramírez. Para Dalla Lasta Baroni, el arrepentimiento no sólo se debe manifestar en palabras. “Hubo más que una negligencia, un atropello o una impericia, hubo riesgo al manipular un arma de fuego de guerra, máxime teniendo en cuenta el conocimiento sobre esa arma de fuego. Las armas no son para jugar”, destacó.

A su turno, el abogado de la defensa Roberto Mazzucco dejó en claro que “no hay discusión sobre la autoría del hecho. Le quitó la vida a su compañero Franco. Vamos a diferir con el fiscal. Sostenemos que no hubo intención”. Para el defensor, se deben valorar los momentos previos y posteriores al hecho y se debe desentrañar qué pasó por la cabeza de su asistido al momento de accionar el arma y matar a su compañero.

“Él sabe que debe responder por el hecho. Era su amigo y compañero. Es entendible el enojo de la familia. La familia de Franco se acercó; Franco no porque estuvo detenido. Las armas son peligrosas. Él es joven y no tenía tanta experiencia. Eso no quita responsabilidad. No hay duda de que fue imprudente y negligente. Él estaba seguro de que no iba a ocurrir. El arma debía estar descargada. Cuando un policía regresa de un recorrido, con un arma peligrosa, siempre según lo exige el procedimiento, el arma se debe descargar y guardar. Cuando se sale de nuevo a un proceso, se vuelve a cargar. Franco estaba convencido de que esa arma no tenía un cartucho. Realmente no tuvo intención y estaba seguro de que no iba a ocurrir”, sostuvo.

En la primera jornada, se presentó una ronda de testigos: policías compañeros de trabajo de Ávalos y Ramírez. Se recordó que momentos previos, Ramírez había estado “jugando” con el arma reglamentaria; mientras le hacía un reclamo a un compañero, le apuntaba con el arma.

Pasado el mediodía, se pasó a un cuarto intermedio. El juicio popular se reanuda hoy, con nuevos testimonios.

Tragedia entre compañeros

  • Franco Emanuel Ávalos, imputado por “homicidio simple con dolo eventual calificado por el uso de arma de fuego”.
  • Víctima, Oscar Ramírez
  • Juez director, Fernando Esteban
  • Por el Ministerio Público Fiscal, el fiscal de Cámara Alejandro Dalla Lasta y el fiscal del caso Ricardo Andrés Córdoba Andreatta.
  • Por la defensa, el abogado del foro local Roberto Mazzucco.
  • El hecho sucedió el viernes 2 de junio de 2023 en el edificio del Grupo de Infantería Motorizada de Acción Rápida (GIMAR), ubicado en la Capital. Ocurrió al momento en que Ávalos manipulaba un arma de fuego, según la investigación.
Seguí leyendo

Te Puede Interesar