domingo 7 de septiembre de 2025
Fiscalía de Violencia de Género

El abogado Filippín pidió realizar un careo con su primo en la causa por abuso

La defensa de Sarmiento Balastegui se había opuesto, pero aceptó tras la última detención de Filippín por desobediencia judicial, que complicó su ya compleja situación procesal.

El abogado Nahuel Augusto Filippín (37), que será juzgado por abuso sexual y otros delitos, pidió un careo con su primo Neri Sarmiento Balastegui (40) en el marco de la causa que los tiene como imputados y que se tramita en la fiscalía de Violencia Familiar y de Género.

Fuentes judiciales informaron que la defensa de Filippín, a cargo del abogado Juan Pablo Morales, había pedido el careo pero la defensora de Sarmiento Balastegui, la abogada María Florencia Lencina, se opuso a la compulsa.

Presuntamente, la estrategia cambió al producirse la última detención de Filippín por desobediencia judicial ocurrida el 30 de agosto, cuando se sacó una tobillera electrónica.

El careo se llevó a cabo el jueves 4 con la participación de las dos partes y la fiscal Antonino. Las declaraciones de ambos tuvieron como eje central los hechos ocurridos en febrero de 2024, que derivaron en una denuncia por abuso sexual por parte de una joven que se constituyó como querellante, con el patrocinio del abogado Sebastián Ibáñez.

Filippín enfrenta un complejo panorama judicial. Fue enviado a juicio por "abuso sexual con acceso carnal en calidad de partícipe necesario", mientras que Sarmiento Balastegui deberá responder por el mismo delito pero en calidad de "autor".

En el mismo debate Filippín será juzgado por "encubrimiento agravado por ánimo de lucro en calidad de coautor", junto a un tercer implicado -Gary García-, por recibir sanitarios robados del Predio Ferial en diciembre de 2024; y "hurto simple" por la sustracción de un aparato de un sanatorio de calle Junín.

Una más

“El señor violó las condiciones de libertad que se le habían impuesto. En este caso, se sacó el dispositivo electrónico dual que tenemos para poder supervisar y para poder controlar las condiciones de libertad”, advirtió la fiscal Antonino frente al juez de Control de Garantías Marcelo Sago en la reciente audiencia en la que se confirmó la detención de Filippín.

Efectivamente, el hombre, que había sido arrestado en diciembre del año pasado, fue liberado a principio de junio porque la Fiscalía omitió pedir que se prorrogue su prisión preventiva.

Al mes siguiente fue arrestado por unas horas tras protagonizar un incidente con un comerciante. El caso fue tramitado por el fiscal de Instrucción N°6 de Distrito Oeste, Facundo Barros Jorrat, quien consideró que no hubo delito y remitió las actuaciones a la fiscalía de Antonino.

Desde junio, el hombre estuvo en libertad con el dispositivo dual (la víctima de abuso cuenta con otro aparato que se activa cuando él se acerca a 300 metros), que, según se informó, se quitó el 30 de agosto desobedeciendo las condiciones impuestas en junio, cuando fue excarcelado.

Presuntamente ese día también intentó evadir un control policial cambiando de asiento de conductor, para luego quitarse el dispositivo y abandonar el rodado que conducía.

Para la fiscal, Filippín tiene un total desprecio por las órdenes judiciales y "representa un peligro para sí mismo y para terceros debido a su policonsumo y personalidad conflictiva".

En este contexto y haciendo foco en el consumo de estupefacientes, la fiscal Antonino solicitó que se mantenga su detención, ya sea como interno en el Servicio Penitenciario Provincial "con controles especiales o mediante una internación involuntaria para un abordaje integral de su situación de salud mental".

Por su parte, el juez Sago determinó que es la fiscal quien debe definir el lugar de alojamiento, "siempre garantizando la evaluación necesaria para determinar una eventual internación involuntaria". Al cierre de esta edición de supo que el hombre fue alojado en el penal de Miraflores.

Fuerte malestar y un estado de alarma constante

Desde el entorno de la víctima de abuso sexual remarcaron que en reiteradas ocasiones advirtieron a la Justicia que la liberación de Filippín implicaba un incremento en su estado de vulnerabilidad, generando un "fuerte malestar y un estado de alarma permanente".

El día anterior a la última detención, este diario publicó parte de una entrevista con la damnificada en la que manifestó: "Quiero saber qué piensa hacer la fiscal, por qué no ordena el arresto. No quiero seguir viviendo con miedo por su culpa".

"Tengo miedo de que me mate, porque ya lo intentó. Si me pasa algo, hago cargo a la Fiscalía y al Juez de Control de Garantías que interviene", enfatizó. La joven destacó que días antes se activó el dispositivo que ella tiene en su poder y que casi al mismo tiempo "llamaron del SAE 911 para preguntarme cómo estaba, si me sentía bien. Pero la verdad es que a esta situación no se la deseo a nadie".

Seguí leyendo

Te Puede Interesar