Frente a una discusión sobre "Peronismo", "Kirchnerismo" y "Economía Popular"
¿Qué es la economía popular?
Por Juan José Sánchez (*)
La economía popular es la economía de quienes no tienen más que su capacidad de trabajo.
Las declaraciones, inentendibles e innecesarias, del ex vicepresidente y ex ministro de Economía Amado Boudou respecto de que la Economía Popular es contraria al Peronismo y al Kirchnerismo, renueva la discusión sobre qué es la Economía Popular y cuál es el sentido de las políticas públicas en apoyo a estas experiencias.
Comencemos por el final, contestando la pregunta: LA ECONOMÍA POPULAR ES LA ECONOMÍA DEL PUEBLO, la economía de quienes no tienen más que su capacidad de trabajo para reproducir su vida y la de su descendencia (su prole). Asalariados o autogestionados, formales o informales, los que defendemos la vida con nuestro trabajo formamos parte de la ECONOMÍA POPULAR. Esta idea de Economía Popular es la que sostienen desde hace más de veinte años, una parte muy importante de académicos y militantes sociales. Esta perspectiva se puede ver en el libro: “Economía Popular: Entre la Emergencia y la Estrategia” de José Luís Coraggio y Erika Loritz (2022, CABA: Ediciones CICCUS).
Pero entonces ¿Qué es el PUEBLO? Para mí no existe mejor definición que ésta:
"Pueblo es el que no oprime y lucha contra la opresión. Es el que asume a los pobres pero no para mantener, sino para trabajar y luchar por modificar las estructuras que generan permanente pobres. Pueblo es todo el que se suma a la angustia y esperanza de los pobres. Es el que se abre a los demás con amor; en la solidaridad, la hospitalidad, con los que sufren, en la lucha diaria, no solo por subsistir sino sobre todo por reasumir su papel liberador". Monseñor Enrique Angelelli.
Hay que tomar consciencia, entonces, que somos una mayoría de trabajadorxs sin capital, o con capital insuficiente como para vivir de rentas. Además, estamos quienes nos solidarizamos y ponemos el cuerpo por modificar las estructuras de la injusticia. Todxs nosotros formamos parte de la Economía Popular.
Por otro lado, hay una minoría que puede vivir de rentas. Los que pueden vivir sin trabajar, ya que controlan todo el capital a su antojo, y además, no necesitan ocuparse del cuidado de sus hijes porque pagan para que otrx lo haga, esos no forman parte de la Economía Popular.
¿Y cómo juega esto con la Doctrina Justicialista del Peronismo?
“Como doctrina económica, el Justicialismo realiza la economía social, poniendo el capital al servicio de la economía y esta al servicio del bienestar social” (PERÓN, 1950).
“La economía no es un fin en sí misma, sino un medio para alcanzar la felicidad del Pueblo y la grandeza de la Nación” (PERÓN, 1954).
“La organización de la riqueza y su explotación tienen por fin el bienestar del Pueblo, dentro de un orden económico que atienda al desarrollo de la Justicia Social.” (PERÓN, 1954)
“La economía no es individual ni colectiva. Es individual en función social. Sirve al bienestar del Pueblo y a la grandeza de la Nación” (PERÓN, 1954).
“El capital debe estar al servicio de la economía nacional y tener como principal objeto el bienestar social” (PERÓN, 1954).
Es decir, para Perón: 1) la Economía es Social; 2) la Economía Social es Popular: se orienta al bienestar y a la felicidad del Pueblo; y 3) es Solidaria: el capital debe estar al servicio de la economía nacional. Por otro lado, Perón ya hablaba de las Organizaciones Económicas Populares (concepto que retoma, sin saberlo, el economista y filósofo chileno Luís Razeto, padre de la “Economía Popular de Solidaridad y Trabajo” recién en la década de los ‘80):
“Las organizaciones económicas del Pueblo deben organizarse y desarrollarse libremente, con la sola condición de que concurran mediante su acción a la consolidación y defensa de la Independencia Económica y el desarrollo de la economía social, base material de la Justicia Social” (PERÓN, 1954).
A mediados del Siglo XX las "organizaciones económicas del Pueblo" eran los sindicatos, los gremios de la burguesía nacional y las asociaciones, cooperativas y mutuales. ¿Cuáles son hoy, Siglo XXI, las Organizaciones Económicas del Pueblo? ¿Los Nuevos Movimientos Sociales no forman parte también de las Organizaciones Económicas del Pueblo?
El Capitalismo de este siglo ya no es el Capitalismo Industrial del Fordismo. El "Ratio Tecnológico" (es decir, la inversión necesaria para crear un puesto de trabajo) ha crecido exponencialmente. ¿Qué inversión necesitamos en el país para generar diez millones de puestos de trabajo asalariado? Si, aproximadamente son diez millones las y los trabajadores que hoy se encuentran trabajando sin salario (se desempeñan en lo que los Nuevos Movimientos Sociales llaman “Economía Popular”).
El problema de las y los trabajadores, activxs ocupadxs sin salario no es un problema sólo de Argentina... ni del subcontinente. No, es un problema global, que arranca ya hace 40 años. En Argentina, de la crisis de la hiperdesocupación no salimos sólo con los cinco millones de puestos formales que se crearon en los 12 años del kirchnerismo, salimos con esos cinco millones más otros cinco millones de trabajadores sin salarios, con ingresos laborales diversos, también apoyados con las políticas públicas del kirchnerismo. No fueron las empresas privadas ("el capital") el que generó esos trabajos, fue el Estado y la fuerza de los pobres (la cantidad de asalariados formales del sector privado no ha cambiado, lo que vivimos a comienzo del siglo XXI ha sido una rotación de trabajadores en el sector privado). Además, hoy se suma el trabajo de cuidado, que debe reconocerse y valorarse de alguna manera (no necesariamente mercantil). Esa es una deuda de la sociedad con todo el Pueblo Trabajador, o como decimos nosotrxs: con la Economía del Pueblo.
Es probable que muchos de los trabajadores sin salarios tengan un patrón visible, que no les paga sus aportes. Pero es muy probable también que ese patrón sea tan pobre como sus mismos empleados. En efecto, hay una neo burguesía nacional pobre o empobrecida. Es un vecino o un pariente que los conchaba para que coman al menos una vez al día. Sería muy conveniente que esa relación se formalice como lo que es: una relación de cooperación para escaparle al hambre, una cooperativa, o un grupo de trabajo asociativo al que se le puede dar un orden de trabajo cooperativo formal. Claro que hay cooperativas "truchas", pero ese es otro problema: un problema de control como el control de la registración de asalariados.
Las ramas de actividad llamadas "populares", son ramas de muy bajo ratio tecnológico, fáciles de crear, pero también son de muy baja productividad ingresos, es decir, no están valorizadas por el mercado. Valiosas, no valoradas.
Por otro lado, fortalecer los puestos de trabajo existentes por fuera de la relación laboral de asalarización significa necesariamente redistribuir los medios de producción, como lo hacen las empresas recuperadas por sus trabajadores a pesar de la oposición de la Justicia y de algunos dirigentes políticos. La Economía Popular no es “economía para pobres”. Es la confrontación por la distribución de la propiedad privada, en un esquema de pluralidad de relaciones, en las que la economía sea tanto individual privada, como colectiva Estatal y comunitaria popular, cumpliendo el mandato que ya se describía en la primera encíclica social de la Iglesia Católica: “Rerum novarum” del Papa León XIII de 1891, de donde surge la “tercera posición”.
La lucha es por la restitución de derechos aún por fuera de la mercantilización del trabajo.Esa es la revolución de este siglo, que no sólo respeta el espíritu de la doctrina Justicialista, sino que la perfecciona en el sentido de abrirla a una pluralidad de relaciones laborales, en el marco de la Comunidad Organizada.
(*) Lic. en Administración y Especialista en Gestión de Economía Social y Solidaria- Coop. de Trabajo Juanito Contreras LTDA.- Movimiento Nacional Cuidadores de la Casa Común.