La Cámara de Diputados aprobó esta madrugada el proyecto de ley que declara a la educación como servicio estratégico esencial y restringe el derecho a huelga de los trabajadores docentes. La iniciativa obtuvo media sanción y fue girada al Senado.
Diputado aprobó el proyecto que restringe el derecho a huelga docente.
La Cámara de Diputados aprobó esta madrugada el proyecto de ley que declara a la educación como servicio estratégico esencial y restringe el derecho a huelga de los trabajadores docentes. La iniciativa obtuvo media sanción y fue girada al Senado.
Se trata de una propuesta legislativa impulsada por el PRO, a través del diputado y exministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, que contó con el respaldo de La Libertad Avanza, la Coalición Cívica e Innovación Federal.
La votación se realizó pasadas las 3 de la madrugada y resultó con 131 votos afirmativos, 95 negativos y 2 abstenciones.
En declaraciones al programa Mañana Central de Radio Ancasti, el diputado nacional Francisco Monti (UCR) explicó que debe tener más peso el derecho a la educación de los niños y niñas.
“Lo que busca este proyecto de ley que hoy ha obtenido media sanción es justamente que en los casos de medida de acción directa o de huelga por parte de docentes exista un mínimo de funcionamiento garantizado”, explicó.
Para uno o dos días de huelga, las instituciones “deben garantizar el funcionamiento mínimo del 30%” de su estructura y “en el caso de que sean tres días continuos o discontinuos en adelante se garantice un 50%”. Es decir, que la protesta se diluya de manera paulatina e instantánea.
Monti continuó: “Esto va a obligar a que la conducción de los establecimientos educativos al inicio de ciclo lectivo organicen en su proyecto institucional la nómina de personal docente y no docente que en caso de existir algún tipo de huelga deban realizar su labor para garantizar que las escuelas funcionen”.
Consideró que esta ley “no soluciona un problema integralmente”, pero es un atenuante porque “los días de clases no se cumplen nunca jamás”.
También expresó que los motivos que llevan a protestar son legítimos y no son responsabilidad de los trabajadores, “pero esto no tiene que provocar el efecto de dejar a los chicos sin clases”.
“Lo que estamos poniendo en valor son los derechos de los niños de recibir educación y no perder días de clases que es algo que se pregona en la Argentina y lamentablemente no se cumple”, analizó el legislador.