El precandidato a diputado nacional por la lista “Cambiando Juntos” del FCS-Cambiemos, Eduardo Brizuela del Moral, aseguró que es “inalterable” su compromiso asumido con la provincia en la defensa de los fondos que le corresponden a Catamarca. Y en medio de la disputa que se disparó por el Fondo del Conurbano bonaerense recordó que, mientras desde hace varios años viene reclamando partidas y promoviendo leyes que beneficien a los catamarqueños y provincias del NOA-NEA, “recién ahora” los gobernadores peronistas –entre los que se encuentra Lucía Corpacci- realizan planteos al actual Gobierno nacional mientras que antes “guardaron silencio” por 12 años durante la gestión del kirchnerismo.
“Hoy se discute en sede judicial un planteo de la provincia de Buenos Aires por el Fondo del Conurbano bonaerense, y bienvenido sea que por fin los gobernadores kirchnoperonistas hayan despertado de su letargo, ese que mantuvieron hasta diciembre de 2015”, manifestó Brizuela.
Sostuvo que el primer día de su mandato como diputado nacional en 2013 promovió que Catamarca recuperara el 15% de la coparticipación que las provincias habían cedido en 1991 en favor de la Nación. “Lo que no dicen algunos gobernadores es que la devolución de ese 15% hoy es una realidad de la mano de Cambiemos tras la firma del ‘Acuerdo para el Nuevo Federalismo y del ‘Consejo Argentino para el Nuevo Federalismo’. Todo esto aun cuando los gobernadores de signo kirchnerista, montados en agenda de campaña, levanten su voz con diversas exigencias ante la Nación, las que callaron durante 12 años donde el kirchnerismo pisoteó el federalismo”, cuestionó.
Respecto a la postura que asumirá en el Congreso Nacional frente a un eventual debate por el Fondo del Conurbano, fue contundente: “Mi compromiso con la defensa irrestricta de los intereses de Catamarca, en mi desempeño como diputado de la Nación, lo asumí desde el primer día de gestión y seguirá inalterable”.
A su vez, indicó que la discusión de un nuevo marco de reparto de recursos entre la Nación y las Provincias es una deuda que la democracia tiene desde 1994, ya que en la Reforma Constitucional de aquel año se emplazaba a todos los actores a saldar esa discusión a más tardar en 1996. “Desde Cambiemos hemos dado pasos enormes para saldar esa deuda, algo que a su tiempo, ni el menemismo ni mucho menos el kirchnerismo hicieron”, analizó.