Carlos Carrizo Salvadores, que en 2013 fue
condenado por la masacre de Capilla del Rosario, fue uno de los represores que
participó del desfile por el Bicentenario en Tucumán, en un grupo
autodenominado "ex combatientes del Operativo Independencia”. La condena
fue anulada por la Cámara Federal de Casación Penal sala III, en un fallo que
ya fue apelado y que probablemente llegue hasta la Corte Suprema de Justicia.
La Dirección de Derechos Humanos de la provincia,
a cargo de Hernán Velárdez Vaca, manifestó su repudio: "Entendemos que estos actos constituyen una provocación hacia las
víctimas del genocidio sufrido en nuestro país como también hacia sus
familiares y a los diversos organismos de DDHH que día a día desde hace 40 años
luchan por más Memoria, Verdad y Justicia”, indica el comunicad.
"La unidad
de los argentinos nunca se logrará mediante el silencio cómplice, mucho menos
mediante la falta de justicia. El genocidio no necesita olvido ni perdón sino
lo contrario, necesitamos memoria para nunca más sufrir persecuciones,
desapariciones e identidades robadas”.
Desde la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), señalaron como
"inadmisible” la presencia de autodenominados"excombatientes del Operativo
Independencia” entre las filas de los que desfilaron en Tucumán.
Del mismo modo, repudió también "la presencia de Carrizo Salvadores,
responsable del fusilamiento de la Masacre de Capilla del Rosario, en
Catamarca; la del carapintada Aldo Rico, quien se alzó contra la democracia, y
la de Emilio Nani, quien actuó en la represión de los hechos de La Tablada en
el año 1989, donde ha sido demostrado que se cometieron graves violaciones a
los derechos humanos”.
Para la Comisión, presidida por Adolfo Pérez Esquivel, la presencia de
estas personas fue una "afrenta a la memoria, al dolor de miles y miles de víctimas y de
familias que sufrieron en carne propia la represión, a los excombatientes de
Malvinas que padecieron sus torturas, y a todo el pueblo argentino que ha
luchado incansablemente por la democracia y los derechos humanos”.
Desde la
agrupación H.I.J.O.S. expresarpn el "más enérgico repudio a las expresiones desarrolladas
durante el desfile cívico-militar llevado a cabo en el marco de los
festejos por el Bicentenario de la Independencia Argentina. "Nos referimos
concretamente el permitir desfilar a personas bajo la consigna Soldados del
Operativo Independencia, con indumentaria militar y estandartes, denominándose
a sí mismos como ex combatientes, en clara reivindicación del terrorismo de
estado, haciéndolo incluso mezclados con ex combatientes de Malvinas
pretendiendo, canallescamente, ponerse en pie de igualdad”, expresan.
"Este
episodio –agrega el parte-, tuvo su correlato en CABA, con una columna de
desfile encabezada por el ex carapintada Aldo Rico, quien atentó contra la
Democracia Argentina en finales de la década del 80. También desfiló el
genocida condenado y recientemente liberado por la Cámara de Casación, Carlos
Carrizo Salvadores, responsable de la Masacre de Capilla del Rosario”.
Desde el
Frente Kirchnerista, el dirigente Roberto Diaz manifestó: "repudiamos
totalmente que quienes atentaron contra el estado de derecho, la democracia y
cometieron actos delictivos tipificados como delitos de lesa humanidad participaran
el desfile del Bicentenario. Tamaña reivindicación del terrorismo de estado es
una provocación a toda la sociedad por parte de un minúsculo grupo de fanáticos.
Lamentamos profundamente que se coloque en el mismo lugar a quienes fueron héroes
de la independencia, con vulgares delincuentes”.
Para
finalizar lanzó duras críticas contra el ministro de Defensa, el radical
riojano Julio Cesar Martinez de quien consideró que debería renunciar a su
cargo, toda vez que reconoció que el Ministerio no habría facilitado la
presencia de los represores en los actos oficiales.
En tanto, la
Correpi se sumó en términos similares a la denuncia.