Violaciones, alcohol y venganza: la segunda denuncia contra López Márquez
“Luego de la violación, se levantaba de mi cama y se iba a su habitación y al otro día él actuaba como si nada hubiese sucedido”, relató Luis Monjes, el segundo denunciante.
La segunda denuncia penal en contra del cura Eduardo López Márquez por supuestos hechos de abuso sexual fue hecha por Luis Monjes. La radicó el 6 de marzo de 2023, en Fiscalía General. En aquella oportunidad, Monjes se refirió a los ultrajes que habría sufrido entre los años 1997 y 2001, cuando tenía entre12 y 14 años de edad, por parte del sacerdote. En la ocasión dijo que estaba afectado psicológicamente y que necesitaba un tratamiento para su salud mental de manera urgente. También reveló de qué modo él buscó dañar a López Márquez, en una suerte de venganza.
“Entre los años 1997 a 2001, esto es entre mis 12 y 14 años de edad, ya sea en vacaciones de verano o los fines de semana, viajaba junto a mi familia a la localidad de Chumbicha. (…) Los viajes los hacíamos para visitar a mi tío Pablo Batallán, hermano de mi madre, quien fuera sacerdote y en esos años antes mencionados, estaba destinado en la parroquia de Chumbicha junto a mi denunciado, Raúl Eduardo López Márquez, quien también es sacerdote. Ambos eran párrocos de la iglesia de Chumbicha. Cuando llegábamos allí nos hospedábamos en la casa parroquial, junto a mi tío Pablo y a mi denunciado, el cual era muy cercano a toda mi familia y le daban un trato familiar, al punto que yo le decía tío. Mi tío y mi denunciado me apodaron 'Pistola'. Pasábamos los días en Chumbicha y en casi todos los viajes, mi tío Pablo le pedía a mi madre que me deje más tiempo para pasar unos días más en la casa parroquial con él y con mi denunciado. Mi madre accedía ya que confiaba plenamente no solo en su hermano sino también en mi denunciado”, declaró Monjes, de acuerdo con la denuncia a la que accedió El Ancasti.
Monjes, además, explicó que sus padres “eran personas muy creyentes, católicas practicantes y para ellos los sacerdotes eran personas con autoridad y a quienes se les debía respeto. En ese contexto, mis padres me dejaban con mi denunciado y con Pablo, al cuidado de ellos, y en la mayoría de esas oportunidades, ambos abusaron sexualmente de mí. Todos los hechos de abuso sexual ocurrieron en la casa parroquial, en horas de la noche, cuando nos sentábamos a cenar.
Ellos comenzaban a beber alcohol y también me daban de beber, al punto de marearme y a veces me daban de beber al punto de embriagarme. Entonces, ambos comenzaban a tocar mis partes íntimas y, luego de ello, cuando ya me iba a dormir, López Márquez, quien tenía su habitación al frente de la habitación en la que yo dormía solo, se cruzaba a la misma y me violaba. Luego de la violación, se levantaba de mi cama y se iba a su habitación y al otro día él actuaba como si nada hubiese sucedido”.
De acuerdo con la versión de los hechos que dio Monjes a los investigadores, López Márquez lo abusó “sistemáticamente durante todos los años mencionados, del mismo modo que relaté”. También añadió que esto “se había hecho en él (por López Márquez) una costumbre a lo largo de los años. Mi denunciado siempre hizo uso de su poder y autoridad que le daba ser sacerdote. Tenía una enorme capacidad de persuasión hacia mi persona. Todos los hechos de abuso sexual de los cuales fui víctima sucedieron cuando yo me quedaba solo con Batallán y con mi denunciado”.
Por último, habló sobre el padecimiento psicológico que le habrían generado estos abusos. “Por todo lo vivido, a raíz de los hechos de abuso sexual de los cuales fui víctima, mi vida fue y es sumamente difícil.
Tengo una enfermedad, cleptomanía, la cual estoy más que seguro que tiene sus orígenes en los hechos de abuso sufridos, ya que recuerdo que en esos años, cuando yo compartía con mi denunciado y con Pablo, yo les sacaba comida o dinero, o ambas cosas, y era una manera de hacerles daño o de devolverles lo que me hacían. Creo que era una manera de vengarme de ellos por el enorme daño que estaban ocasionando. Necesito de manera urgente tratamiento psicológico”, cerró.
Actualmente, esta causa está siendo investigada por la fiscal de Instrucción Nº 1, Yésica Miranda. Antes lo había hecho el fiscal de Instrucción Nº 9, Jonathan Felsztyna. Por ahora, López Márquez no está imputado en este expediente.n
Pedido de informe al Obispado
La fiscal Miranda, quien retomó la investigación de la segunda causa por supuestos hechos de abuso sexual en contra del cura, pidió informes al Obispado de Catamarca para conocer detalles relacionados con la actividad sacerdotal de López Márquez al momento en que habrían ocurrido los ultrajes; y también para saber en qué situación se encuentra en la actualidad. Así lo señaló días atrás el abogado querellante, Sebastián Ibáñez, en diálogo con la prensa.
El letrado indicó que la fiscal avanzó con “pedidos de informe al Obispado sobre la condición sacerdotal de López Márquez. De hecho, el mismo López Márquez mencionó que sigue siendo sacerdote. Se requiere la confirmación oficial del Obispado y acerca de la situación de prestación de servicio de él en el momento de los hechos”. En aquella oportunidad, el letrado Ibáñez mencionó que Monjes iba a ampliar la denuncia en contra de López Márquez. n