La propietaria que sufrió un robo en su local, agradeció la rápida intervención policial y reclamó una respuesta judicial firme contra los delincuentes que actúan de manera reiterada en la zona.
La inseguridad sigue siendo una preocupación constante para los comerciantes y vecinos de Valle Viejo. Este lunes, Mariana Guillén, dueña de una pequeña proveeduría ubicada en la esquina de Manuel Navarro y Congresal Colombres, fue víctima de un nuevo acto de vandalismo y robo, protagonizado por los conocidos “revientavidrieras”.
Los delincuentes irrumpieron en el local a plena siesta, pasada las 16, y destrozaron las vidrieras para ingresar y llevarse mercadería, dejando el lugar revuelto y dañado.
La alerta fue dada por un vecino y cliente de Guillén, quien al pasar por el local notó las puertas forzadas y la ausencia de los propietarios. Al llegar, la comerciante encontró un escenario desolador: mercancías tiradas, estanterías volcadas y múltiples destrozos. Inmediatamente dio aviso a la policía, que actuó con rapidez en esta oportunidad, logrando detener a uno de los responsables pocas horas después gracias a las imágenes captadas por las cámaras de seguridad del local. Otro sospechoso sigue prófugo.
Un llamado a la justicia
Tras agradecer el rápido accionar policial, Guillén expresó su indignación ante la falta de una respuesta firme por parte de la justicia. Según la dueña del comercio, los mismos delincuentes son detenidos, pero no permanecen bajo custodia por más de 72 horas antes de recibir algún beneficio que les permite quedar en libertad y continuar delinquiendo. “Estos sujetos tienen un perfil delictivo claro y fuerte, pero los comerciantes estamos desprotegidos. Es necesario que la justicia acumule todas las causas que tienen y dé una respuesta real a la sociedad”, reclamó.
Inseguridad constante
Este es el segundo episodio de robo y vandalismo que sufre Guillén en el año, y sus palabras reflejan el cansancio de quienes trabajan en Valle Viejo, donde los comerciantes sienten que la inseguridad es ya una problemática insostenible. "No podemos seguir viviendo con este temor constante; cada día se nos hace más difícil sostenernos, porque en cualquier momento viene alguien y te destruye el esfuerzo de años", lamentó.
La comerciante espera que este último incidente motive a las autoridades judiciales a tomar medidas más estrictas, para garantizar que los responsables no queden en libertad tras un breve período de detención. "Es hora de que se dé una respuesta a los vecinos y comerciantes que día a día luchan por mantenerse a flote, a pesar de la inseguridad que nos afecta", concluyó Guillén.
Contexto y antecedentes
Valle Viejo ha registrado un aumento en los delitos contra la propiedad en los últimos meses, especialmente en horas de la siesta, cuando los comercios suelen estar cerrados. La modalidad de los “revientavidrieras” se ha convertido en una amenaza frecuente para la comunidad, que reclama mayor presencia policial y una acción judicial más efectiva que frene la reincidencia de estos delitos.
Las autoridades locales han prometido reforzar la vigilancia en la zona, pero el pedido de justicia de Guillén y otros comerciantes sigue resonando, como un llamado urgente para frenar la impunidad y devolver la tranquilidad a las calles de Valle Viejo.
