Con la fuerte sospecha de que el móvil del asesinato de Juan Carlos Rojas fue por dinero o por una cuestión sentimental, Fiscalía explora otras líneas de investigación además de Silvina Nieva, quien es hasta ahora la única imputada por el crimen.
De acuerdo a la información a la que pudo acceder El Ancasti, son varias las personas que están bajo la lupa de los investigadores. Se trata de personas que, actualmente, todavía no fueron desvinculadas de la causa y que conocían a la víctima.
Por otra parte, se supo que mañana podría haber novedades sobre el informe que emitirá Gendarmería Nacional Argentina (GNA) sobre los 15 celulares secuestrados, que fueron enviados la semana pasada a Buenos Aires. Está previsto que GNA también realice un análisis de evidencia digital en esos celulares.
Los dispositivos, además, deben ser evaluados en el Laboratorio Satélite del Poder Judicial, ubicado en el departamento Valle Viejo.
Se estima que la visualización de los celulares demandará horas y hasta días.
Sin embargo, los celulares no son la única fuente de información. Es que, a ello, deben aunarse los datos que puedan surgir del ámbito financiero, de los vínculos y las actividades de Rojas, más el aporte que pueda realizar la División Homicidios de la Policía.
Esto significa que la información que se encuentre en los celulares no sería concluyente porque no se la puede interpretar de manera aislada, sino que debe ser vinculada con los datos mencionados previamente.
Mientras, ya se logró descartar de la investigación otros discos de memoria y dispositivos digitales, que también habían sido secuestrados. Este diario pudo saber que, días atrás, se realizó una descarga de correos electrónicos en cuentas de mails.
Los investigadores también abrieron la caja de seguridad que fue secuestrada del edificio de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA) el pasado viernes 6 de enero. En esa caja fuerte había documentación y dólares.
Aparentemente, Nieva era la única persona que tenía la llave de esa caja de seguridad.
Hipótesis
La hipótesis más fuerte sobre el crimen de Juan Carlos Rojas tenía como nexo la relación sentimental que el exministro tenía con su empleada doméstica, Silvina Nieva. No obstante, los investigadores no descartan que el hecho de sangre haya tenido su origen por una cuestión económica.
Ésta es una de las incógnitas que tienen los investigadores que están llevando adelante la causa y también la querella. El fiscal del caso, Hugo Leandro Costilla buscan establecer o descartar si el móvil del crimen responde a un interés económico.
Días atrás, el abogado querellante, Iván Sarquís dialogó con El Ancasti y comentó que Costilla pidió informes a bancos y financieras sobre movimientos que puedan haberse realizado en los momentos previos al crimen del exfuncionario.
“El fiscal, el Ministerio Público, han emitido a pedido a distintas entidades bancarias y financieras que por favor informen, que remitan información respecto de los movimientos financieros que puede haber en las cuentas, si hay cuentas registradas a su nombre (por Rojas) y cuáles son los movimientos. Eso es un pedido de rigor que se hace a los fines de determinar o de trazar las actividades económicas y poder descartar cualquier móvil que tenga que ver con el homicidio”, aseguró en aquella oportunidad.
El letrado señaló que quieren “determinar los movimientos económicos y financieros de Juan Carlos en momentos previos (al crimen), descartar cualquier hipótesis que tenga que ver con el robo, con la sustracción. Creemos que a la fecha eso no ha sido debidamente solventado, por decirlo en algunos términos”.
