El viernes pasado se cumplieron dos meses del brutal crimen de Luis Héctor Calderón, un reconocido docente de Belén. Por este asesinato, Gabriel “Gabocha” Carrizo y su novia, una adolescente de 17 años, están imputados por los delitos de “homicidio in criminis causa” y “robo”. Además, el 15 de marzo fue el día de su nacimiento. El maestro belicho hubiese cumplido 60 años. En conmemoración a esta particular fecha, vecinos, amigos y familiares marcharon por tercera vez para pedir justicia.
“Hoy era un día de fiesta para nosotros porque iba a festejar su cumpleaños. Estaba muy ansioso esperando su cumpleaños, muy contento e ilusionado con sus 60. Unos malvivientes no lo quisieron así y hoy tenemos que salir a pedir justicia por su desaparición física”, expresó su sobrino.
El joven manifestó que “tío Héctor” “en nuestro corazón va a estar siempre, eternamente. Lo extrañamos mucho. Seguramente él está viendo lo que estamos sufriendo y pasando”.
Si bien agradeció el acompañamiento, al mismo tiempo aseguró a la comunidad belicha que continuarán con el pedido de justicia, “no importa que seamos pocos”. Para la familia Calderón, un nuevo crimen no puede pasar en este pueblo ni en ningún lugar del mundo.
A la vez que recordó que siempre dormían tranquilos, con la puerta abierta.
“Nos preguntan por qué seguimos con las marchas si los asesinos están a la vista. Pedimos una urgente sentencia, perpetua para los asesinos. Nos parece increíble que a dos meses, no hayan llevado al asesino a una cárcel de máxima seguridad. Todavía está acá; no lo trasladaron”, manifestó.
El vocero dio las gracias a la Justicia por su rápido accionar, pero exigió que la causa “no duerma” porque “nada nos va a devolver a nuestro tío. Queremos que se haga justicia. Nadie lo merece, menos una persona que le dio tanto a su comunidad. Te amamos tío y feliz cumpleaños donde quieras que estés”, expresó.
La imputación que pesa sobre los sospechosos prevé la pena única de prisión perpetua.