El fiscal Ezequiel Walther concedió la libertad a "Nesquik” Castro, un hombre acusado de un intento de abuso contra una niña de 12 años, tras el pago de una fianza de 30.000 pesos.
El caso trascendió a los medios debido a que los vecinos le propinaron una feroz paliza que lo dejó hospitalizado varios días y le prendieron fuego la casa cuando lo descubrieron, presuntamente, intentado ultrajar a la niña. El episodio ocurrió en el barrio Los Bajos de San Isidro (Valle Viejo), el sábado 27 de agosto.
Una semana después, el juez de Control de Garantías, Rodolfo Maidana, ordenó su traslado al Servicio Penitenciario de Miraflores donde supuestamente permanecería hasta la sustanciación del juicio. Sin embargo, Castro quedará libre tras el pago de la caución aunque seguirá ligado a la investigación.
Castro tiene otra causa abierta por delito sexual contra una adolescente de 15 años con quien habría mantenido una relación sentimental. Está imputado por "abuso sexual con aprovechamiento de la inmadurez sexual de la víctima".