Una mujer policía, cuyos datos no fueron revelados por la Justicia, finalmente fue imputada por las agresiones físicas y psicológicas causadas a una mujer que se desempeña como artesana y había sido arrestada en un procedimiento en plena Peatonal Rivadavia.
Ayer a la mañana se concretó la indagatoria contra la policía, quien fue imputada por el fiscal de instrucción N° 2, Mauricio Navarro Foressi, bajo la figura conocida como "Severidades", que figura en el artículo 144 bis 3) y que prevé una pena que va de 1 a 5 años de prisión e inhabilitación especial por doble tiempo.
La denuncia por el hecho se hizo pública durante la marcha Ni Una Menos, concretada el 3 de junio, cuando Pamela y Fabiana se dirigieron al público y contaron su cruda experiencia. El incidente había ocurrido el 29 de mayo a la tarde cuando estaban ofreciendo sus artesanías en la peatonal y fueron sorprendidas por personal policial que les manifestó que tenían que retirarse porque estaban cometiendo una contravención.
Pese a que ellas explicaron que tenían autorización municipal, en forma violenta, según la denuncia, un numeroso grupo de policías -hombres y mujeres- las trasladaron hasta la comisaría seccional Primera, en donde habrían sido víctimas de apremios ilegales.
"Yo me resistí, sentí miedo de entrar" contó Pamela. "Nos pegaron cachetadas. Nos pusieron con los pies hacia arriba y nos pegaron con un palo de goma. Nos picanearon en los pechos y en la ingle. La mujer policía que se cayó participaba y nos gritaba 'mirá lo que nos hiciste hacer'”.
Fueron imputadas por "resistencia a la autoridad". Pamela fue liberada 48 horas después, pese a que le decía a los policías que tenía que amamantar a su bebé.