El vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, garantizó ayer que el Gobierno planteará un "tope más bajo que antes" para incrementos en tarifas del gas en la audiencia del 16 de septiembre próximo, y reconoció que en el ajuste que frenó la Corte Suprema hubo "aumentos desmesurados".
Según el funcionario, "más que tope, lo que estamos haciendo es un paso inicial de corrección, más tenue de lo que se había planteado antes, junto con una escalera gradual para ir reduciendo los subsidios a lo largo del tiempo".
"Va a haber un tope más bajo que antes, pero la definición de tope pone el foco en eso, cuando lo más importante es cómo le pega a los distintos sectores el aumento tarifario", enfatizó Quintana, en declaraciones a radio La Red.
Además, aseguró que el objetivo de la Casa Rosada es que "nadie sufra aumentos desmesurados como hubo algunos casos antes" del fallo de la Corte que anuló los incrementos tarifarios del gas, que tenían un tope del 400% para los usuarios residenciales.
Con las correcciones, dijo, "damos cumplimiento al planteo que hizo la Corte Suprema, en términos de gradualismo sobre las normas de juego".
"En estos días, consensuamos con expertos energéticos este camino. Y lo que iniciaremos en los próximos días es un proceso de diálogo con distintos sectores de la sociedad", añadió.
Según el funcionario, el diálogo será con "el sector productivo, dirigentes políticos, gobernadores, consumidores, para dar a toda la sociedad un camino de salida a esta situación que todo el mundo reconoce como irracional".
