El papa León XIV brindó un mensaje para la conferencia de la UIA: "Todo trabajador tiene derecho a vivir con dignidad"
El papa León XIV participó de la Conferencia de la UIA a través de una carta que toma fuerte relevancia de cara al debate por la reforma laboral que se viene.
A pocas semanas de que el Congreso de la Nación comience a debatir la reforma laboral que impulsa el gobierno de Javier Milei y cuyo borrador anticipa un fuerte recorte de derechos de los trabajadores, el papa León XIV participó este jueves, por medio de una carta, de la 31a Conferencia de la Unión Industrial Argentina (UIA) y llamó a defender la dignidad de los trabajadores.
En ese sentido, el sumo pontífice advirtió: "se subrayan el derecho a un salario justo; a formar asociaciones y a vivir con dignidad".
"Estas enseñanzas, nacidas en un momento de profundas transformaciones industriales, siguen teniendo una sorprendente actualidad en el mundo globalizado que habitamos, donde la dignidad del trabajador continúa siendo vulnerada muchas veces", advirtió León XIV.
En su mensaje, el Papa llamó a "defender la industria como motor de desarrollo, de empleo y de dignidad social", especialmente en un contexto económico adverso, y alentó a recuperar "la esperanza productiva" del país.
"La economía y la empresa, cuando se orientan al bien común, pueden y deben ser motores de futuro, de inclusión y de justicia", afirmó el Papa, en el marco del Jubileo de la Esperanza.
En su carta, recordó los principios de la Doctrina Social de la Iglesia, inspirada en la encíclica Rerum novarum (1891), que denunció las injusticias laborales de su tiempo y defendió el derecho a un salario justo, al descanso, a la asociación y a una vida digna.
El pontífice subrayó además que "la economía no es un fin en sí misma, sino un aspecto del tejido social donde se desarrolla el proyecto de amor de Dios para cada ser humano", y advirtió que la producción y el beneficio "no deben buscarse de manera aislada", sino orientarse al bien común y al desarrollo integral de las personas.
El Papa destacó la figura de Enrique Shaw, empresario argentino y ejemplo de compromiso cristiano en el mundo del trabajo. "Shaw entendió que la industria no era sólo un engranaje productivo, sino una comunidad de personas llamadas a crecer juntas", expresó.
Y recordó que el empresario argentino promovió salarios justos, impulsó la formación y acompañó a las familias obreras, mostrando que "la eficacia económica y la fidelidad al Evangelio no se excluyen". Su vida, agregó, demuestra que "la caridad puede penetrar incluso en las estructuras industriales y financieras".
En su mensaje final, León XIV exhortó a los dirigentes y empresarios argentinos a renovar su compromiso con una industria innovadora, competitiva y humana, capaz de sostener el desarrollo "sin dejar a nadie atrás".
"El mundo necesita empresarios que trabajen por una economía al servicio del bien común", concluyó el Papa.