jueves 28 de noviembre de 2024
Sorpresa en la comitiva argentina

La Argentina retiró a su delegación de la cumbre del clima COP29 en Azerbaiyán por orden de Javier Milei

A través de su canciller, Gerardo Werthein, el presidente Javier Milei ordenó retirar a la delegación argentina que participaba del evento.

La subsecretaria de Ambiente, Ana Lamas, informó a los medios internacionales que la comitiva argentina volvería de inmediato al país, sin brindar mayores detalles sobre los motivos detrás de esta sorpresiva medida. “Tenemos órdenes del ministro de Relaciones Exteriores de no participar más, es todo lo que puedo decir”, explicó Lamas a The Guardian, causando revuelo dentro de la cumbre. La decisión de Milei de retirar a la Argentina de la COP29 refleja una postura política que pone en duda la gravedad del cambio climático, a pesar de los impactos visibles que ya está sufriendo el país.

Durante la campaña presidencial y en su gobierno, Milei ha sostenido públicamente que el cambio climático es una falacia y que las políticas globales de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero solo buscan "recaudar fondos para financiar vagos socialistas". Este enfoque se alinea con el rechazo a la agenda ambiental que también adoptó el expresidente estadounidense Donald Trump, con quien Milei mantiene estrechos lazos.

Con esta salida, la Argentina no solo abandona la mesa de negociaciones en la COP29, sino que también deja de participar de grupos clave como el G77 + China, una alianza que reúne a países en desarrollo, incluidos varios latinoamericanos. Esto podría tener consecuencias en términos de imagen internacional y en la capacidad del país para acceder a fondos de financiamiento climático, cruciales para afrontar los daños que ya está provocando la crisis ambiental.

image.png

La sorprendente decisión de retirar a la delegación argentina de la COP29 se produce en un momento clave para las negociaciones climáticas globales. La cumbre tiene lugar en un contexto en el que los países más desarrollados, como Estados Unidos y los miembros de la Unión Europea, están siendo presionados para aumentar su aportación al financiamiento climático y a la reparación de los daños sufridos por los países más pobres y vulnerables. Con la Argentina fuera de la mesa de negociaciones, el gobierno de Milei podría estar aislando aún más al país de las discusiones clave sobre cómo mitigar y adaptarse a los efectos del cambio climático.

Al mismo tiempo, la decisión sorprende en un momento en que Milei se prepara para viajar a Estados Unidos, donde se reunirá con Donald Trump, uno de los principales exponentes del escepticismo sobre el cambio climático. Esta reunión podría reforzar la postura de Argentina en contra de las políticas internacionales para mitigar el calentamiento global, pero también aleja al país de un escenario donde el acceso a financiamiento y cooperación internacional se vuelve cada vez más crucial.

Según el último informe sobre clima y desarrollo de Argentina elaborado por el Banco Mundial, el cambio climático podría reducir el Producto Bruto Interno (PBI) de Argentina hasta un 4% anual para 2050. La sequía histórica que afectó al país entre 2020 y 2023, con pérdidas de hasta el 50% en los cultivos de soja, maíz y trigo, es solo un ejemplo de los efectos devastadores que podrían repetirse si no se adoptan medidas de adaptación. Además, si el clima sigue deteriorándose, se estima que hasta un 25% de la superficie irrigada del país podría perderse, lo que causaría pérdidas económicas anuales millonarias, especialmente en la región de Cuyo.

Por otro lado, las nuevas medidas del gobierno de Milei, que han eliminado la posibilidad de seguir negociando estos fondos internacionales en la COP29, podrían agravar aún más esta situación, limitando el apoyo de la comunidad internacional frente a una crisis ambiental de enormes proporciones.

Seguí leyendo

Te Puede Interesar