Tras la polémica puesta en funcionamiento de la Asamblea Constituyente impuesta por el régimen de Nicolás Maduro, Argentina, Uruguay, Paraguay y Brasil, fundadores del Mercosur, decidieron de forma unánime suspender a Venezuela por "ruptura del orden democrático", medida que el bloque adopta por segunda vez contra un país miembro.
"La suspensión de Venezuela fue aplicada en función de las acciones del Gobierno de Nicolás Maduro y es un llamado para el inmediato inicio de un proceso de transición política y restauración del orden democrático", señaló el comunicado suscrito tras una reunión de los cancilleres de los cuatro países en Sao Paulo.
"Estamos diciendo paren con esto, no más muertes, no más represión", dijo el canciller de Brasil, Aloysio Nunes.
Una expulsión no está contemplada en el protocolo de Ushuaia, ni es la intención, aclaró el ministro de Brasil, que ejerce la presidencia temporal del bloque. "Queremos que Venezuela vuelva", dijo.
"Esencialmente lo que está diciendo el Mercosur es sin democracia no", puntualizó su par argentino, Jorge Flaurie.
El punto de quiebre lo marcó la elección el domingo pasado de una Asamblea Constituyente promovida por Nicolás Maduro, cuestionada por la comunidad internacional, y el regreso a la cárcel de los dirigentes opositores Leopoldo López y Antonio Ledezma, que cumplían prisión domiciliaria.
Rechazo
Tras la suspensión, Nicolás Maduro, dijo que su país "jamás" será apartado del bloque, y profirió duras críticas. "A Venezuela no la van a sacar del Mercosur. Jamás. (...) Algunas oligarquías golpistas como la de Brasil o unos miserables como los que gobiernan en Argentina podrán intentarlo, pero siempre estaremos ahí", declaró a la Radio Rebelde de Argentina.
Maduro, acusó a su par argentino, Mauricio Macri, de ser "la punta de lanza de la agresión contra el pueblo de Venezuela" y calificó a su Gobierno como una "oligarquía miserable", tras rechazar la decisión del Mercosur de expulsar al país caribeño.