Al llegar a la zona y muy contrario a lo que esperaban, lo que más les llamó la atención de todo lo que había quedado al descubierto tras el estallido, fue una anaconda de unos 10 metros y 400 kg.
Rápidamente uno de los operarios grabó al animal y las imágenes no tardaron en viralizarse, aunque al hacerlo no son pocos los que criticaron a los trabajadores, quienes alegaron que encontraron al animal muerto, por levantarlo por el aire con una excavadora.