Con solo cuatro participantes en la casa, Santiago del Moro condujo la décimo novena gala de eliminación de Gran Hermano en la que el público tuvo que decidir entre eliminar a Julieta Poggio, Romina Uhrig y Nacho Castañares.
Para continuar, suscribite a El Ancasti. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
Acceso hasta 40 notas mensuales en el portal de El Ancasti.
Para continuar, suscribite a El Ancasti. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
Acceso hasta 40 notas mensuales en el portal de El Ancasti.
Con solo cuatro participantes en la casa, Santiago del Moro condujo la décimo novena gala de eliminación de Gran Hermano en la que el público tuvo que decidir entre eliminar a Julieta Poggio, Romina Uhrig y Nacho Castañares.
Esta semana, pese a que no hubo gala de nominaciones, sí se llegó a nombrar al primer finalista cuando Marcos Ginocchio venció a Romina Uhrig en un concurso de preguntas y respuestas que llevó dos noches en el ciclo de Telefe.
De esta manera, quedaron automáticamente “en placa” Julieta, Nacho y Romina, que quedó en el ojo de la polémica entre los seguidores del reality en las redes sociales, donde se comenzaron a aparecer muchos “trapitos sucios” inéditos.
En las últimas horas apareció un polémico audio atribuido a Walter Festa, el ex de Romina, instando a la militancia del Frente de Todos a votar masivamente a Nacho. El exintendente de Moreno había asegurado la semana pasada que, si Cristina Fernández se lo pedía, Romina volvería a la política.
Esta semana, Del Moro le pidió a Gran Hermano que deje ingresar a la casa a los parientes de los cuatro finalistas, por lo que el lunes entraron las hijas de Romina, y el martes lo hicieron la abuela y la pareja del padre de Nacho.
El miércoles, la mamá, el papá, la hermana y el novio de Julieta pudieron ver a la influencer en el SUM de la casa, y el jueves llegó el encuentro más emotivo cuando José Alberto, el papá de Marcos, dejó de lado su reticencia a aparecer en los medios y lo visitó.
La gala de eliminación salió de toda previsibilidad cuando Santiago del Moro anunció que la primera "salvada" por el público era Julieta, lo cual despertó reclamos en las redes sociales bajo el tópico “Gran armado”.
De esta manera, la final se dirimió entre Nacho y Romina, y esta vez sí, la exdiputada fue la elegida por el público para dejar la casa. “Ahí tienen para hacerse las empanadas, ¿eh?”, les recordó la participante a sus excompañeros al cruzar la puerta de la casa.
Con Caramelo en brazos, Romina se despidió de Julieta, Nacho y Marcos con igual cariño y enfiló para la salida. “¡Qué nervios, qué nervios! Los quiero. Disfruten, por favor”, les aconsejó la ex de Walter Festa antes de salir con Caramelo y su valija por la puerta grande. Del Moro explicó luego que Uhrig recibió el 57,69 por ciento de los votos, frente al 42,31 por ciento de Nacho.