La fiscal de la Sexta Circunscripción Judicial, Graciela Jorgelina Sobh, pidió que la mujer que denunció a su expareja y padre de sus hijos de arrancarle dos dientes a golpes y causarle doble fractura de tabique nasal sea sometida a “pericia ginecológica” en el marco de una denuncia por abuso sexual que la damnificada se animó a realizar tras el salvaje ataque ocurrido en la cuidad de Recreo a fines de junio.
Según la información a la que pudo acceder El Ancasti, el 24 de agosto –dos meses después del ataque-, a pedido de la defensa del sospechoso de apellido Díaz, la fiscal dispuso que el Cuerpo Interdisciplinario Forense (CIF) realice una “pericia ginecológica a (la víctima), a efecto de determinar si presenta signos de haber sido abusada sexualmente y en caso positivo, días de curación”; y el “estado del cuerpo de la víctima” con un especialista en otorrinolaringología del CIF para determinar “si presenta signos de violencia”.
En este contexto la querella particular, representada por la abogada Silvia Barrientos, aseguró: “Nunca me pasó que un fiscal pida pericias ginecológicas para determinar si hubo abuso sexual o no, cuando lo que se tiene que aplicar es el protocolo para casos de abuso”.
En diálogo con este diario explicó que la resolución de la fiscal Sobh “es ofensiva para los derechos de una víctima de abuso sexual que, además, es revictimizada. Es una aberración lo que hizo y nos vamos a oponer firmemente a esa pericia ginecológica porque la fiscal tiene que activar los protocolos de abuso”. Hizo hincapié en que se trata de una “aberración” porque “para hacer una pericia se debe oficiar a todas las partes que intervienen en esta etapa de la investigación para que cada una -a través de un perito designado-, presencie y observe el cuerpo de la víctima".
"O sea que todos van a estar mirando las partes íntimas de la damnificada para ver si existen rastros de abuso cuando hay personas que denuncian después de años un abuso sexual y no se les hace un examen ginecológico. Este examen compone el protocolo de abuso cuando el hecho ocurrió recientemente, no hace meses o años”, recalcó.
Finalmente se conoció que de oficio declaró la nulidad de la segunda pericia realizada a la víctima, que certificó que tenía 30 días de discapacidad, contrariando la primera pericia, que le dio 12 días de reposo sin mencionar días de discapacidad ni curaciones. A pesar de las graves lesiones causadas, el sospechoso fue imputado por "lesiones leves calificadas por mediar una relación de pareja en calidad de autor (dos hechos), amenazas en calidad de autor (un hecho), y hurto en calidad de autor, todo en concurso real".