miércoles 23 de abril de 2025
Exintendente condenado a 9 años de cárcel por abuso sexual

Nueva fecha para escuchar a la defensa de Guaraz en Casación

El 18 de marzo se postergó la audiencia de expresión de agravios. Se impuso una nueva fecha. Malestar de la víctima.

El exintendente de Bañado de Ovanta Elpidio Guaraz presentó a fines del año pasado un recurso de casación atacando la condena de 9 años de prisión por “abuso sexual con acceso carnal” y “privación ilegítima de la libertad”. Según se informó, la audiencia prevista en la Corte de Justicia para el 18 de marzo fue postergada para mediados del mes que viene porque el recusante no concurrió al llamado.

Guaraz busca que la sentencia sea revocada y la nueva convocatoria es para el 15 de abril, cuando se llevará a cabo una audiencia y su defensa, a cargo de Luciano Rojas, podrá fundamentar el recurso interpuesto.

Carolina, la mujer por cuyo abuso el ex jefe comunal fue condenado, a través de un posteo en redes sociales comentó que “en septiembre de 2024 mi agresor E.G. fue condenado en primera instancia a 9 años de prisión, pero nunca quedó detenido. Luego presentaron la Casación. Dicha audiencia se fijó para el 18 de marzo de 2025, fecha en la cual nuevamente con excusas cobardes como lo viene haciendo no se presentó. Hoy me encuentro con una nueva fecha de audiencia fijada por la Corte para el 15 de abril”.

“Me hago mil preguntas, busco respuestas, busco justicia. Creo que nadie dimensiona lo que se sufre día tras día esperando el brazo acogedor de la Justicia que no llega. No imaginan lo que significa seguir esperando y saber que está libre, que se mueve con total impunidad y se burla de mi situación. Siento que continúa violentándome, que continúa abusando. Concurre a mi casa materna en Las Cañas con total libertad”, agregó.

Aseguró además que Guaraz “se desplaza en sus vehículos por todos lados mientras que yo padezco no poder caminar tranquila, ni siquiera para hacer una compra. No poder vivir tranquila, sabiendo que puede seguirme, que puede hacerme daño. Vivo con miedo, con mucho miedo y necesito que me escuchen, que todo termine pronto y quede definitivamente donde debió estar hace años, en la cárcel”.

“Mi lucha fue y es muy desigual. El poder, la complicidad, el dinero, la protección política, etc., fueron algunos de los elementos a los que tuve que hacer frente solo con un escudo: la verdad. Esa verdad que duele pero nunca se callará. ¿Por qué las víctimas tenemos que esperar tanto? ¿Por qué ellos, los agresores, gozan de miles de privilegios?”, remarcó.

Para finalizar, hizo hincapié en que el año pasado "cuando el Tribunal de Primera Instancia lo condenó volví a creer. Me sentí abrazada y protegida por primera vez en este largo proceso. Pero ese momento duró poco ya que jamás lo encarcelaron y sigo pidiendo empatía y protección".

Seguí leyendo

Te Puede Interesar