El presidente de la Unión Comercial de Catamarca, Sebastián Luna Guzmán, y el presidente de la Federación Económica, Alejandro Segli, coincidieron en que el bono de $60.000 que dispuso Nación para los trabajadores “es una imposición” y sostuvieron que el mecanismo es mediante una paritaria.
“La incomodidad y el enojo vienen por la forma, no por el monto en sí. La Constitución Nacional prevé un ámbito en el que se discute la parte salarial que son las paritarias. Además, las dos principales partes involucradas, tanto los empresarios como los empleados, no pueden decir si están de acuerdo o no con la suma fija, si les parece mucho o les parece poco. Nos parece claramente un avasallamiento del Gobierno. No es la forma. Vamos a ver si hay algún tipo de acercamiento, porque de todas formas los sueldos ya se están liquidando de la manera habitual. Si se paga el bono, se liquidará por fuera. Es una situación muy difícil porque las pymes argentinas están viviendo un momento muy complicado, el bolsillo de la gente lo sufre. Hacer política con el bolsillo ajeno no es correcto”, opinó Luna Guzmán.
En diálogo con Radio Ancasti recordó que durante la pandemia el Estado aportó en algunos casos para los sueldos de los trabajadores “pero no fue gratis”. “Después no se pudo tomar crédito durante muchísimo tiempo, trajo sus complicaciones. El empresariado aporta sus impuestos día a día, como lo hacemos todos. El problema no son los 60.000 pesos. No es la recomposición salarial, todos estamos de acuerdo que es necesaria en el contexto tremendo que estamos viviendo. El problema es cómo se plantea”, reclamó.
“Ahora dicen que dependiendo del tipo de empresa puede haber una devolución de hasta el 100% no en dinero, por supuesto, sino en impuestos”, explicó el comerciante.
Por su parte, Segli aseguró que “esta imposición nos tiene bastante preocupados”. “No por el monto en sí, sino por la forma. Esto es sobrepasar todo lo que se viene haciendo desde hace mucho tiempo a través de las paritarias”, remarcó el empresario.
“El sector privado tiene la tesitura de no pagarlo. Estamos haciendo las presentaciones correspondientes con CAME y los distintos sectores económicos como la Unión Industrial y ver de qué manera el Gobierno puede dar marcha atrás. En el caso de CAME y la Cámara Argentina de Comercio, hace poquito tiempo se han reunido ya han fijado los aumentos para los meses venideros, entonces no creemos lógico ni justo que se nos imponga de esta manera este bono. Uno como empresario no puede vivir en el día a día, tiene que tener previsibilidad por lo menos en el cortísimo plazo y claramente esto nos saca de toda planificación”, analizó Segli.