Tras rechazar el pedido de la oposición para realizar una sesión especial con la intención de repudiar los hechos de violencia que se denunciaron contra el intendente de Pomán, Francisco Gordillo (FT), la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Guerrero (FT), cruzó a la oposición y tildó de “actitud circense” la de algunos legisladores. “Cuando asumí mis responsabilidades juré cumplir con la Constitución y no estoy dispuesta a vulnerar sus normas para satisfacer el interés circense de la pretensión opositora”, dijo en Facebook.
“Algunas publicaciones en las redes sociales intentan aviesamente deslegitimar mi posición y actuación en cuestiones de género por haber rechazado el pedido de sesión especial articulado por legisladores de la oposición para tratar la situación del intendente de Pomán, sobre quien pesa una denuncia por violencia de género. Dicho rechazo se sustenta en estrictas normas constitucionales, más precisamente en las prescripciones contenidas en los artículos nº91 y nº92 de la Constitución de Catamarca, cuya atenta lectura les recomiendo a mis detractores”, sostuvo Guerrero, que había sido criticada por diputados del radicalismo.
“Cuando asumí mis responsabilidades, juré cumplir con la Constitución y no estoy dispuesta a vulnerar sus normas para satisfacer el interés circense de la pretensión opositora, cuyos legisladores, en su mayoría, ni siquiera cumplieron con el imperativo legal de la Ley Micaela, que establece la formación obligatoria en perspectiva de género para funcionarios y funcionarias, incluidos los diputados y diputadas provinciales”, respondió la presidenta.
“Aclaro que el Poder Legislativo se encuentra en receso, no está sesionando, porque el período de sesiones ordinarias recién comienza el 1° de mayo y finaliza el 30 de noviembre. Tampoco estamos en sesiones extraordinarias, cuya facultad de convocatoria es atribución exclusiva del Poder Ejecutivo. Y si no pudo reformarse la Constitución, fue por la negativa rotunda y sistemática de la oposición. Si hubieran habilitado la reforma constitucional y el período de sesiones ordinarias hubiera empezado el 1° de febrero como proponíamos, el Poder Legislativo estaría sesionando y se podría haber tratado el caso Gordillo sin ningún inconveniente”, expresó.n