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SUSCRIBITEAl lado de unos nichos del cementerio municipal de Valle Viejo, Miguel Ferreyra describió las imágenes que tiene en su mente del ataque fatal que terminó con la vida de su hijo, Miguel Ángel Ferreyra (28) el último domingo en el barrio de las 140 Viviendas, en el departamento mencionado.
De acuerdo con lo que narró el padre de la víctima, a Miguel Ángel lo golpearon cuando ya estaba “penando” en el suelo, luego de ser apuñalado en el pecho, a la altura del corazón.
En este sentido, se refirió indirectamente a Mónica Beatriz Murúa, la madre de Jorge Castro, el principal sospechoso de haberle dado muerte a Miguel Ángel.
“Él (por Miguel Ángel) ha ido a reclamar las cosas que le han robado (por un casco de moto y columnas de hierro), y no ha ido a buscar pleito, no ha ido a buscar nada de eso. Simplemente que le devuelvan las cosas. Se hicieron los malos. Como andaba solo, les pareció lindo de quererlo llevar por delante. Se paró, peleó, él la llevaba ganando. Cobardemente, buscaron un cuchillo. Vinieron como siete compañeros más y lo atacaron”, expresó.
Luego, el progenitor de Miguel Ángel remarcó que cuando su hijo cayó al suelo “le pegan el puntazo. Una chica (sería la hermana de Castro), cuando él tenía el cuchillo clavado en el pecho, ha venido y se lo ha sacado.
Ahí es donde al sacárselo al cuchillo entra aire adentro y empieza a sentirse mal. Ahí en el suelo, llega la madre del muchacho que apuñala a mi hijo (por Murúa), le pegaba con un palo, con todo, lo aprovechaban en el suelo. Él ya estaba penando, prácticamente”.
Miguel, además, indicó que el fiscal de Instrucción Nº 2, Laureano Palacios, quien está a cargo de la investigación del suceso, “ha pedido las cámaras de los vecinos” y los sospechosos “están muy comprometidos”.
“No tan solo va a haber uno o dos. Son varios los que van a ir presos. (…) Yo como padre tampoco me gusta empeorar las cosas. Voy a dejarlas en mano de la Justicia. No me gusta hacer represalias ni nada de eso (…)”, agregó.
En otro pasaje, recordó a su hijo como “una buena persona” que “se hacía querer con mucha gente”.
“Por ahí había chicos que estaban pasando una mala situación y él siempre sacaba esa chispa, los hacía reír, los hacía alegrar, tenía ese carisma que compraba a la gente. Por eso lo quieren mucho. El que lo conoce y el que ha tratado con él sabe lo que estoy hablando”, siguió.
Por último, pidió que el o los responsables del crimen de su hijo “paguen lo que tienen que pagar”.
Jorge Castro y su madre, Mónica Beatriz Murúa, fueron imputados formalmente ayer por el fiscal. Palacios acusó a Castro por el delito de “homicidio simple en calidad de autor” y a Murúa por “homicidio simple en calidad de partícipe secundaria”.
Castro y Murúa fueron trasladados hacia el edificio de Fiscalía General para la indagatoria y allí se abstuvieron de prestar declaración.
Estuvieron asistidos por sus abogados defensores, Jorge Bracamonte (hijo) y Arturo Herrera Basualdo.
Está previsto que en las próximas horas el investigador Palacios pida la audiencia de control de detención para ambos ante el Juzgado de Control de Garantías.
El fiscal Palacios avanza con la pesquisa del homicidio. Hasta el martes a la noche siguió tomando declaraciones testimoniales de testigos presenciales del hecho, según la información a la que accedió El Ancasti.
También iba a realizar la visualización de las imágenes registradas por cámaras de seguridad. Además, al investigador debían entregarle más imágenes de otra cámara de seguridad.
Durante la semana se podrían llevar a cabo las pericias psiquiátricas de Castro y Murúa.n
