“Fue un accionar doloso, con un arma de fuego. Debe confirmarse la resolución anterior”, sostuvo el fiscal Penal Juvenil Guillermo Narváez. Ayer, la Cámara de Apelación Penal Juvenil, por unanimidad, confirmó la elevación a juicio de la “Balacera en Las Mil”. La víctima fatal fue Gonzalo Moreno. A la vez, ordenó la detención inmediata y traslado del acusado al Servicio Penitenciario Provincial, en Capayán.
Por este hecho, Ariel Aragón fue imputado por el delito de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego” y a un adolescente se lo acusó por “abuso de armas”. De acuerdo con información a la que pudo acceder El Ancasti, el joven se presentó de manera espontánea en la Comisaría Novena, a efectos de cumplir con la orden resuelta por esta Cámara.
El Tribunal estuvo integrado por los jueces Fabricio Gershani Quesada –del Tribunal Penal Juvenil- y sus pares de la Cámara de Sentencia en lo Criminal de Primera Nominación, Fernando Esteban y Mauricio Navarro Foressi. El Ministerio Público Fiscal estuvo representado por el fiscal del fuero especializado Guillermo Narváez, quien estuvo acompañado por las abogadas de la querella Natalia Páez Vaca y Natalia Rodríguez. La defensa fue ejercida por el abogado del foro local Pedro Vélez.
El lamentable episodio de violencia ocurrió el domingo 28 de agosto del año pasado, en el populoso barrio de Las Mil Viviendas. Gonzalo Moreno, un joven de 25 años, recibió una herida de arma de fuego en la cabeza y falleció días después.
En la oportunidad, la defensa había planteado su oposición a la elevación a juicio. Además, había insistido en un cambio de calificación. Para el defensor, hubo una “legítima defensa” o un “homicidio en ocasión de riña”. Su asistido recuperó la libertad el pasado 30 de junio, cuando en la instancia de Control de Garantías se resolvió el cese de prisión preventiva –estipulado por 10 meses-, por considerarse que el plazo estaba vencido. Al mismo tiempo, se confirmó la elevación a juicio por el delito más grave.
“Un grupo fue a agredir (…). Hubo una legítima defensa privilegiada (…). Es el típico caso de legítima defensa privilegiada. Intentaban romper la defensa de la casa del imputado. Había una puerta dañada, con camas y mesas como vallas, en horario nocturno”, remarcó la defensa.
Oposición
A su turno, el fiscal Narváez resaltó que el principal interés de la defensa es “revocar la elevación a juicio”. Según el fiscal, se obtuvo prueba “con esfuerzo” sobre la autoría del disparo. “Fue un accionar doloso, con un arma de fuego. No dudó en sesgar la vida”, consideró.
A la vez, remarcó que si bien ya se tomaron testimonios y no queda más prueba por producir, se trata de una causa compleja, por la cantidad de imputados. “El riesgo procesal debe tenerse en cuenta durante todo el proceso: la investigación y la etapa previa al juicio. La finalidad es el normal desarrollo del juicio”, advirtió.
Por su parte, la querella adhirió a los planteos del Ministerio Público Fiscal. “La defensa da una hipótesis pero no apoya con pruebas. No da cuenta de su razonamiento para que pueda corroborarse”, señalaron. Para la querella, “no corresponde la legítima defensa. Hay indicios de peligrosidad”, insistió.
Expediente
El hecho de sangre sucedió el 28 de agosto del año pasado, en el populoso barrio de Las Mil Viviendas. Gonzalo Moreno (25) fue la víctima fatal.
La causa tiene dos imputados. El principal acusado, mayor de edad, debe responder por “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”. Un adolescente fue acusado por “abuso de armas”.
La Cámara de Apelación Penal Juvenil estuvo integrada por los jueces Fabricio Gershani Quesada –del Tribunal Penal Juvenil- y sus pares de la Cámara de Sentencia en lo Criminal de Primera Nominación, Fernando Esteban y Mauricio Navarro Foressi.
El Ministerio Público Fiscal estuvo representado por el fiscal del fuero especializado Guillermo Narváez.
La querella fue representada por las abogadas Natalia Páez Vaca y Natalia Rodríguez.
El abogado particular Pedro Vélez asiste a ambos acusados.