Se vence hoy el período de detención de Facundo Ariel Monasterio, sospechado de haber participado en el intento de homicidio de Roxana Murúa en enero de este año en El Bañado, departamento Valle Viejo.
El hecho ocurrió en enero. Están detenidas dos mujeres con prisión preventiva. Un chico implicado está libre.
Se vence hoy el período de detención de Facundo Ariel Monasterio, sospechado de haber participado en el intento de homicidio de Roxana Murúa en enero de este año en El Bañado, departamento Valle Viejo.
La causa es tramitada por el fiscal Penal Juvenil, Guillermo Narváez -debido a que también fue sindicado un adolescente que se encuentra en libertad-, y se espera que en las próximas horas se lleve a cabo la audiencia de prisión preventiva y se determine si Monasterio continuará detenido o si será liberado.
Por el hecho, María Eugenia Castro y su madre María Gilda Márquez están detenidas desde enero. Dos meses después de la detención, la Cámara de Apelación Penal Juvenil les confirmó la prisión preventiva.
La salvaje agresión que sufrió Murúa sumó a fines de abril a dos nuevos imputados, Monasterio y el menor.
Por el hecho, Castro y Márquez fueron acusadas y desde entonces se encuentran privadas de la libertad.
Luego de la detención de los otros dos sospechosos, Narváez los imputó como partícipes necesarios y el juez del fuero especializado Rodrigo Morabito les confirmó la detención.
Monasterio fue trasladado al Servicio Penitenciario Provincial, en el departamento Capayán, mientras que el chico terminó alojado en el Centro Juvenil Santa Rosa.
Posteriormente, la Cámara de Apelación Penal Juvenil –presidida por Morabito-, confirmó la prisión preventiva para Castro y Márquez, madre e hija respectivamente.
Márquez fue imputada por la posible comisión del delito de “homicidio calificado por alevosía en grado de tentativa en calidad de autora”.
En tanto que Castro, Monasterio y el adolescente fueron acusados por el mismo delito pero como partícipes necesarios.
A partir de un nuevo cúmulo de pruebas, el fiscal modificó el decreto de determinación del hecho para evitar posibles nulidades.
La agresión ocurrió el 20 de enero, alrededor de las 22. Roxana Murúa se encontraba en el Salón de Usos Múltiples del barrio 140 Viviendas de El Bañado. Estaba con su hijo de 13 años y su pareja. Hubo una discusión entre el hijo de Roxana y el adolescente de 16 años que luego resultó imputado.
Este último se retiró y a los pocos minutos regresó en compañía de Márquez, Castro y Monasterio. Los adultos habrían llegado portando varillas de hierro de construcción en sus manos. Márquez habría llevado un cuchillo “tipo sierrita” entre sus prendas de vestir.
Los cuatro se dirigieron hacia el lugar donde estaba el chico de 13 años y Roxana habría intercedido para defender a su hijo.
De acuerdo con el testimonio de algunos testigos, Castro habría golpeado con su puño a Roxana en la mandíbula. En esa agresión, Márquez –su hija- habría cooperado para que la mujer no pudiera defenderse. Castro habría golpeado a Roxana con un fierro en la nuca y Monasterio también la habría agredido con un elemento similar en la espalda. Aprovechándose de su indefensión, Márquez le habría asestado dos puntazos.