De cara a las elecciones legislativas, la candidata a diputada nacional por el FIT-U remarcó las aspiraciones de su partido y reforzó su cuestionamiento al Gobierno.
La candidata a diputada nacional por el Frente de Izquierda y los Trabajadores – Unidad (FIT-U), Alejandra Figueroa, destacó la lucha que lleva adelante la izquierda como un espacio independiente, sin apoyo estatal ni financiamiento de grandes estructuras partidarias.
“Somos conscientes de que a la izquierda le cuesta mucho, pero también somos conscientes de que es porque somos un partido independiente de todos los gobiernos, que nos autofinanciamos. Cada folleto, cada propuesta que llevamos a la calle, nos cuesta mucho a cada uno de los compañeros y compañeras”, remarcó.
Figueroa reconoció que “la izquierda tiene un problema” al no poder “conjugar todos juntos y pechar juntos”, aunque aclaró que eso se debe a que se trata de distintos partidos que coinciden en muchas cuestiones, pero también tienen diferencias. “A diferencia del peronismo o de los radicales ahora con la Libertad Avanza, nosotros sostenemos nuestros ideales”, afirmó.
La candidata también se refirió al rol de la clase trabajadora en la gestión de los servicios públicos. “Yo confío en los trabajadores y trabajadoras. El PAMI tiene que ser manejado por jubiladas y jubilados, y las fábricas por quienes trabajan allí todos los días. El dueño que se lleva la plata con pala no tiene idea de cómo funciona una máquina”, expresó.
Figueroa cuestionó además la designación de personas sin experiencia específica al frente de áreas sensibles como salud y educación. “Vos ponés un abogado o un contador como ministro y no van a entender nunca cuál es la necesidad que tienen los trabajadores. Un docente tiene que estar en el Ministerio de Educación, y un médico en el de Salud”, sostuvo, y agregó: “Pueden ser excelentes profesionales en lo suyo, pero como ministros no tienen ni idea de dónde están parados”.
En medio de un complejo contexto económico y social, crecen las críticas hacia el acto encabezado por el presidente Javier Milei en el Movistar Arena. Para Figueroa, el evento fue una “payasada” que contrasta con la difícil situación que atraviesa la mayoría de los argentinos.
“La verdad que fue una burla a toda la sociedad, a todo el pueblo, que la estamos pasando realmente muy mal por las decisiones que ellos llevan adelante”, expresó la referente del FITU, quien también apuntó contra la diputada Lilia Lemoine, presente en el evento. “Es la misma que mandó a los profesionales del Garrahan a manejar un Uber si no les gustaban las condiciones laborales”, recordó.
Además, la dirigente cuestionó que mientras el país asume una nueva deuda con el Fondo Monetario Internacional y se siguen entregando recursos estratégicos a manos extranjeras, “el presidente canta y celebra en un acto que no tiene nada que ver con las urgencias del pueblo”, concluyó.
