El dirigente gremial quiere que la causa termine en juicio. La imputación tiene una expectativa de pena de hasta 10 años de prisión. "Es una sartenada de mentiras, armaron la causa en dos horas", expresó.
El exsecretario general del SOEM Walter Arévalo fue acompañado por su abogado Iván Sarquís y en la Cámara Penal 2 fue notificado de la calificación de la causa iniciada a fines de 2020 y que se encamina a jucio.
El letrado Sarquís indicó que el juicio, que no tiene fecha, “va a tener un tribunal unipersonal en la Cámara Penal 2” y que en la jornada “se han realizado notificaciones formales y procedimentales” para el avance.
El dato relevante es que, pudiendo apelar a otras instancias, desde la defensa instan a que la causa avance y Arévalo sea sometido a un juicio.
“Él confía en la Justicia y considera que esta situación debe ser aclarada, si es necesario un debate público para ello, aunque corra el riesgo de tener una condena, él tiene el anhelo de enfrentarlo”, infirmó Sarquís en una nota con El Ancasti.
Recordó que el incidente que involucró a Arévalo y al funcionario municipal Alberto Natella se originó en el contexto de un reclamo gremial de trabajadores precarizados de “Higiene Urbana” de la Municipalidad de la Capital.
“Las ‘amenazas’ han sido desistidas y el imputado ha sido sobreseído, y hoy nos encontramos con una imputación de ‘coacción agravada’, con una expectativa de condena de hasta 10 años de un dirigente sindical que lo que ha hecho todo este tiempo es bregar por la reincorporación de trabajadores injustamente desvinculados del municipio”. Arévalo aseguró que esos 25 precarizados hoy son empleados de planta permanente y recordó el momento en que esta causa le costó cinco días de arresto.
“Quien está impulsando esto no es la querella, sino nosotros”, sostuvo Arévalo.
“Los políticos de turno no pueden utilizar el aparato judicial para encarcelar a los que no se venden, y esto es una clara utilización y persecución en mi contra”, declaró.
“El funcionario (por Natella) se sintió amenazado por un mensaje del 15 de septiembre, el 4 de agosto me invita a tomar un café y me terminan acusando por coacción agravada. Acá está claro que a esto lo impulsó el Gobernador, el Intendente de la capital y quiero el debate, voy a ir hasta las últimas consecuencias”.
Expuso que la causa “está armada” y por esto no optó por otras estrategias para buscar archivarla o terminarla.
“Para que la sociedad vea la sartenada de mentiras que hay en la causa, de cómo el fiscal aceleró en menos de dos horas todo un proceso y a mí me detuvieron cinco días con el fin de ‘domesticar’ una clara lucha sindical, donde dejaron sin trabajo a 25 personas con un listado que no firmó ningún funcionario”, expresó Arévalo.
