Silvio Robles, el hombre de confianza de Horacio Rosatti, rechazó entregar su teléfono para que se investiguen los supuestos mensajes que habría intercambiado con Marcelo D’Alessandro, el ministro de Justicia y Seguridad porteño que entró en uso de licencia después de que estallara el escándalo. A raíz de una denuncia del gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, el juez federal Guillermo Molinari intimó a Robles a que depositara su teléfono en la Secretaría de turno de la Corte Suprema y todo aquel aparato que use para comunicarse. Sin embargo, el vocero y director general de la vocalía de Rosatti rechazó la posibilidad de dejar en manos de Molinari su celular.