viernes 29 de marzo de 2024
Conflicto minero

Aguirre le respondió a Córdoba: "Nunca llama, salvo por problemas personales"

Para el ministro de Seguridad de la provincia, los "actores institucionales" deben contribuir a la calma en Andalgalá.

El ministro de Seguridad Gustavo Aguirre refutó al intendente de Andalgalá Eduardo Córdoba, quien deslizó que “no le atiende el teléfono”, en el marco del conflicto minero. “El intendente Córdoba nunca llama, hoy lo escuché temprano que no le atiendo el teléfono. Nunca llamó, salvo para cuestiones personales, ahí llama, pero cuando hay un problema del pueblo jamás suena mi teléfono ni de ningún integrante del ministerio”, explicó Aguirre, que sostuvo que los “actores institucionales” deben contribuir a la calma.

“Cuando (Córdoba) habla que el Estado provincial y sus funcionarios deben garantizar la paz social, creo que también el municipio y sus actores deben contribuir a esa paz social no avalando ni fogoneando los movimientos internos y violentos que se producen en Andalgalá. Todos tenemos que ser responsables y trabajar en conjunto en ese sentido”, declaró Aguirre.

También indicó que el Gobierno está dispuesto “a las mesas de diálogo y todos los espacios donde podamos converger políticas positivas para la comunidad”, pero que Córdoba fue esquivo. “El Gobernador lo ha convocado varias veces, y siempre ha buscado una excusa para no participar. Entonces creo que la responsabilidad de garantizar la paz social es de todos los actores institucionales que trabajamos en Andalgalá y en la provincia”. Aguirre agregó que Raúl Jalil “está en conocimiento de toda la situación" y que “siempre la directiva es que tratemos de canalizar institucionalmente todo y encontrar una respuesta legal a las acciones que se van realizando”.

Ratificó el ataque

Aguirre catalogó como un ataque a la Policía el enfrentamiento de ayer, que terminó con policías y manifestantes lesionados. “Debemos reflexionar en torno a eso, acá hubo un alzamiento contra las autoridades que la constitución establece y pone en funcionamiento. Eso es lo llamativo. Debemos llamar a la reflexión para que ejerzamos la responsabilidad que nos corresponde para restablecer la calma y canalizar las discusiones y las diferencias a través del dialogo y los mecanismos institucionales, como ser la Justicia y otros mecanismos que se han creado para la participación y donde quienes no están de acuerdo con las actividades mineras puedan hacer valer su reclamo”.

Y agregó: “Claramente sentimos que hubo un alzamiento violento contra autoridades públicas; los estaban esperando a la altura de Choya un grupo minoritario de gente violenta que había generado una barricada en medio de la calle con piedras y árboles, impidiendo el paso a la Policía de Catamarca, no a camiones mineros o una empresa privada. Y después ejercieron violencia contra el fiscal, o sea las dos autoridades públicas encargadas de hacer cumplir la ley en Andalgalá, contra ellos ejercieron acciones violentas, no contra las mineras”, destacó.

El grupo de policías que participó del incidente volvía de acompañar a un grupo de mineros en la montaña: “200 operarios mineros debían cruzar por un camino que estaba siendo cortado por alrededor de 15 antimineros, y teníamos la preocupación concreta de que podía haber algún hecho de violencia en el lugar, (los policías) estuvieron presentes para garantizar la integridad física de todos, se logró y no hubo ningún inconveniente en ese momento”.

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