El Frente de Todos comenzó a trabajar en pulir las asperezas que puedan haber quedado tras la interna que hubo en las elecciones primarias, que particularmente dentro del justicialismo dejó a muchos más precandidatos en el filtro que cualquier otra fuerza política. El 11 de agosto se presentaron 48 listas colectoras, y de cara a las elecciones generales de octubre solo siete siguen en carrera, con los concejales que buscan la reelección como principales referentes. Además, se enfrentan a la posibilidad histórica de ganar en todos los circuitos.
Las elecciones primarias sirvieron para posicionar a los principales referentes del justicialismo en los circuitos de la Capital, en los que hubo una fuerte disputa. En ese contexto, solo el concejal Ariel Pedemonte quedó sin la posibilidad de ser reelecto, mientras que el resto de los oficialistas ya aspira a un segundo mandato.
En el circuito 1 y 2 fue categórico el triunfo de Nicolás Zavaleta, que le sacó más de mil votos a su inmediato perseguidor en el Frente de Todos y quedó a 200 votos de la sumatoria de los dos candidatos de Juntos por el Cambio. Si repite en octubre y al menos uno de los otros cuatro candidatos justicialistas aporta a su causa, el camino a la reelección estará allanado.
Lo mismo ocurrió en el circuito 3 con el actual presidente del CD, Daniel Zelaya, que obtuvo casi 4.500 votos, cifra que le alcanzó para tener una distancia de 2.300 votos respecto de su principal competidor interno, pero además se ubicó a unos 250 votos de la sumatoria de los cuatro precandidatos de Juntos por el Cambio. Sin embargo, Zelaya deberá trabajar para unir a los dirigentes "heridos" tras la compulsa. Gonzalo Mercado, que resultó segundo tras Zelaya, se despachó en las redes y consideró que "es una lástima que quien ganó las PASO no nos convoque para trabajar. La humildad y el respeto no se heredan, no creo que agrediendo o menospreciando a un compañero podamos llegar a cumplir los objetivos", dijo en alusión al concejal.
En el circuito 4, por su parte, el hombre del Grupo Esperanza, Gustavo Frías, también tuvo una interna más reñida y se alzó por unos 200 votos de diferencia. Allí, la totalidad de los candidatos del Frente de Todos (fueron siete) doblaron en votos a los tres de Juntos por el Cambio, por lo que Frías deberá esforzarse para arrebatarle la banca al concejal Diego Villafáñez (que ganó su interna por apenas 50 votos). En ese contexto, ya felicitó públicamente a sus adversarios internos y los invitó a "sumar de cara a octubre".
En el circuito 5 sorprendió la derrota del concejal Pedemonte, a manos de Miguel Rasjido, dirigente de la Agrupación 22 de Junio, que comanda el ex concejal Juan José Sigampa, que ya tuvo un enfrentamiento público con Pedemonte cuando compartieron el Concejo. Sin sumar al resto de los votos del Frente de Todos, Rasjido tomó una distancia de 1.100 votos del candidato de Juntos por el Cambio, Dante Espinoza. Sin embargo, indirectamente Rasjido fue criticado por la dirigencia que acompañó a Pedemonte, que sostiene que el concejal perdió "por jugar limpiamente, sin ensuciar a nadie".
En el circuito 6, Fernando Arias se impuso ampliamente sobre sus cuatro rivales internos, pero en el mano a mano entre candidatos perdió con Aldo Cancino, de Juntos por el Cambio, que no tuvo interna. Arias también fue cuestionado por otros dirigentes en las redes, que lo acusaron de jugar en contra del resto de sus adversarios.
Por su parte, Alejandro Díaz Martínez, hombre cercano a los hermanos Armando y Dante López Rodríguez, también tuvo un triunfo ajustado, pero ya se contactó con los dirigentes del circuito 7 y aunque no hubo ofrecimientos, invitó a sus contendientes "a sumar para ganar en octubre". Algo similar ocurrió en el 8 y 9, donde Francisco Sosa, del Grupo Esperanza, necesitará de sus rivales internos para vencer en el mano a mano al concejal Carlos Álvarez.