El domingo 15 de enero, Dardo Ezequiel “El Peque” Condorí (33) le dijo a un amigo “voy a buscar plata, ya vuelvo”. Condorí manifestó eso al mismo amigo que lo acercó en moto hasta las cercanías de la casa de Raymundo “Gringo” Barrionuevo (81), a quien encontraron asesinado el lunes 16 de enero. Así lo indicó José Barrionuevo, hijo de Raymundo, en una entrevista con El Ancasti.
José mencionó que el amigo dejó a Condorí “cerca” de la vivienda del “Gringo” y, desde allí, “El Peque” hace “toda la caminata y está filmado cuando él (por Condorí) viene en la moto con el amigo. Hay cámaras que lo ven, que lo sitúan a él cuando viene en la moto, a la hora, todo”.
José detalló que se lograron mejorar las imágenes que habían sido registradas por cámaras de seguridad. También agregó que, en el entorno familiar de Raymundo, ya no quedan dudas de que es Condorí la persona que sale de la casa de la víctima del crimen ese domingo.
“La mayoría de mi familia, más que todo, en base al video que se ha mejorado, la imagen de las cámaras de seguridad, se pudo observar y no nos quedan dudas respecto de que es efectivamente Condorí el que sale de mi casa (por la casa de Raymundo). No quedan dudas, por lo menos en mi familia, de que es él”, aseguró José.
El hijo de Raymundo resaltó que el fiscal de Instrucción en feria, Alejandro Gober, le comentó que Condorí “había salido desde la casa del padre con este amigo en la moto, que lo trajo hasta la escuela en el barrio San Ramón, y de ahí se hizo caminando hasta mi casa (por la casa de Raymundo). La remera era del amigo, las zapatillas que tenía puestas son del hermano”.
José indicó que hay muchos testimonios que lo ubican a Condorí “en el lugar del hecho”. Y también se refirió a “situaciones posteriores al hecho que son contadas por el amigo de él, que nos hablan a las claras de que existe una gran posibilidad de que él sea el autor del aberrante crimen contra mi padre”.
Dinero
Según las declaraciones del hijo de Raymundo, Condorí aparentemente quiere justificar el dinero con el que realizó compras “diciendo que mi hermana le había dado ese dinero”. José explicó que su hermana Graciela, que es pareja de “El Peque”, dijo que el jueves anterior al asesinato el acusado “se fue diciendo que se iba a comprar huevos con 1.000 pesos y no volvió más, hasta el lunes. Ese día que encontraron a mi padre, a la tarde, apareció de vuelta en la casa”.
Impunidad
Por otra parte, a José le consultaron por aquello que habría motivado a Condorí a utilizar prendas ajenas ese domingo, y respondió: “Justamente eso, cometer el hecho y lograr impunidad porque de otra manera no se explica la gorra, porque él no usaba gorra; la remera del amigo; las zapatillas del hermano. Esas zapatillas, con los estudios que se están haciendo, lo van a situar a él, si así es, en el lugar del hecho. Cuando uno se hace de elementos que no son de uso personal y los usa en un delito como éste, no tiene otra cuestión que lograr la impunidad, no ser reconocido, pasar desapercibido y que nadie lo conozca”.
Audiencia
Ayer, el abogado Marcos Gandini asumió como nuevo defensor de Condorí y solicitó que postergue la audiencia de control de detención de “El Peque”, que había sido programada para el lunes a la mañana en el Juzgado de Control de Garantías.
El juez de Control de Garantías en feria, Lucas Vaccaroni, hizo lugar al planteo de Gandini para que el defensor pueda acceder al expediente de la causa. Además, Vaccaroni resolvió que la audiencia de control de detención se realice el miércoles 1 de febrero a las 9.
Cronología
15/1 Entre las 7.30 y las 8.40 habría sido asesinado Raymundo Barrionuevo. En esa franja horaria estuvo Dardo Condorí, según quedó registrado en una cámara de seguridad.
16 /1/ Aproximadamente a las 11 es encontrado el cuerpo por Rafael, uno de los hijos de Barrionuevo. El hombre había ido a llevarle la comida para el almuerzo. Su padre estaba tendido en el comedor sobre un reguero de sangre. Había un gran desorden en toda la vivienda. La autopsia confirmó que murió por un shock hipovolémico ocasionado por heridas de arma blanca. Tenía numerosos puntazos en el cuello y en el tórax.