Un hombre de 45 años fue asesinado en las afueras de Mar del Plata, cuando un ladrón entró en su casilla para llevarse las únicas pertenencias que tenía. La víctima recibió cerca de 50 puñaladas y el asaltante escapó con un televisor y una garrafa.
Luego del crimen, el asesino de 23 años volvió a su casa y se acostó a dormir. Poco después fue detenido.
Un hombre de 45 años fue asesinado en las afueras de Mar del Plata, cuando un ladrón entró en su casilla para llevarse las únicas pertenencias que tenía. La víctima recibió cerca de 50 puñaladas y el asaltante escapó con un televisor y una garrafa.
Por el crimen fue detenido su vecino, Ezequiel Orbes (23 años), al que todos en el barrio lo señalan por un largo y oscuro historial delictivo en el barrio.
El asesinato ocurrió el miércoles en una casa en avenida Centeno (Antártida Argentina) y calle 449, del barrio Santa Rosa del Mar. Luis Arturo Aravena Ramos, la víctima, fue hallada en la mañana del jueves por el dueño de la casa donde estaba viviendo. Lo encontró en el piso del comedor, en medio de un charco de sangre.
Según la reconstrucción efectuada por el personal de la DDI Mar del Plata y la fiscal María Florencia Salas, el crimen ocurrió cerca de la medianoche del miércoles. Orbes vivía en casa de su madre, construida detrás de la vivienda de Ramos.
El ladrón entró a la casa de su vecino para robarle cualquier objeto de valor para luego revenderlo, una modalidad a la que el joven estaría acostumbrado, según declaraciones de vecinos citados por medios locales.
Según el diario La Capital de Mar del Plata, Ramos vivía en una situación de precariedad: apenas tenía una tele, un colchón en el suelo y una garrafa. Era de nacionalidad chilena y le habían prestado esa casa a cambio de que la cuidara. Trabajaba de vender choripanes en un puesto montado ahí mismo. Cuando Orbes intentó entrar a la casa se encontró con Ramos, quien intentó defenderse. Durante el violento forcejeo, Orbes lo atacó con una cuchilla y le causó varias heridas superficiales y dos puñaladas mortales en el cuello. El cadáver fue hallado más tarde con cerca de 50 cortes.
Para la fiscalía, no hay dudas de que Orbes mató al hombre de 45 años para lograr el robo y ocultar el crimen. La causa está calificada como homicidio criminis causa, que prevé pena de prisión perpetua.