Nuevamente vecinos del barrio Montecristo vivieron momentos de tensión cuando integrantes de dos familias conocidas en el barrio se trenzaron en lucha ayer a la madrugada.
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Nuevamente vecinos del barrio Montecristo vivieron momentos de tensión cuando integrantes de dos familias conocidas en el barrio se trenzaron en lucha ayer a la madrugada.
La gresca terminó con tres heridos, un adolescente que sufrió un profundo corte y traumatismo en la cabeza mientras que dos hombres de apellido Cordero sufrieron politraumatismos y múltiples puntazos que demandaron asistencia médica del SAME y traslado al Hospital San Juan Bautista.
Ninguno de los tres debió ser internado. Según fuentes policiales, el incidente ocurrió entre las 1.05 y 1.30 en el domicilio de la Cordero, cuando un grupo de personas que habría estado encabezado por integrantes de la familia Aguirre llegó al inmueble y tras una fuerte discusión se inició la pelea.
En diálogo con El Ancasti, los Cordero aseguraron que fueron agredidos en su casa por la otra familia, que no es la primera vez que sucede y que "estamos cansados de que nos vengan a pelear". Comentaron que las agresiones también ocurren en la calle con insultos y pedradas. Vecinos de la zona que pidieron mantener en reserva sus identidades por temor a represalias, aseguraron que están "hartos de las peleas y las corridas".
Informaron que "en la cuadra cada tanto hay algún lío", y que la pelea "fue por un ajuste de cuentas por una presunta deuda, como lo que sucedió a principio de año".
Visiblemente consternados admitieron que el personal policial "llegó rápido" y reclamaron: "Queremos que alguien del Ministerio de Seguridad o de la Justicia venga y vea lo que pasa acá. ¿O están esperando que muera alguien?".
Además, recordaron otro grave incidente registrado el 9 de enero a las 16.50 en el mismo barrio, cuando un adolescente fue demorado pocas horas tras efectuarle disparos a los pies a una joven con un arma "tumbera" o de fabricación casera.
El sospechoso de 16 años se fugó y poco después fue interceptado por efectivos de la Comisaría Décima, a quienes agredió con un hierro. Según fuentes policiales, la joven agredida era su cuñada y habría sido integrante de la familia Cordero.
Se habría tratado también de ajuste de cuentas por una deuda. Afortunadamente no hubo heridos. Al igual que en este nuevo hecho apedrearon a móviles policiales y al personal policial interviniente.
Por la intervención de adolescentes actúa la Justicia Penal Juvenil, que no ordenó medidas restrictivas de la libertad para los implicados en el hecho de sangre.