Un suboficial del Ejército Argentino fue hallado sin vida en el cuartel de la Guarnición de Ejército Monte Caseros, en Corrientes. Si bien se investigan las causas de deceso, las primeras hipótesis sugieren que se trató de un suicidio.
El hecho sucedió horas después del hallazgo sin vida del soldado Rodrigo Gómez. Dos tragedias que enlutan al Ejército Argentino.
Un suboficial del Ejército Argentino fue hallado sin vida en el cuartel de la Guarnición de Ejército Monte Caseros, en Corrientes. Si bien se investigan las causas de deceso, las primeras hipótesis sugieren que se trató de un suicidio.
El suboficial principal Juan Pereira fue encontrado muerto en horas de la madrugada dentro de las instalaciones del Centro de Educación Operacional (CEO) y se dio aviso de inmediato a las autoridades. En el hecho intervino personal de Gendarmería Nacional y el caso quedó a cargo del Juzgado Federal de Curuzú Cuatiá. Las primeras hipótesis sugieren que se trató de un suicidio, aunque la causa se encuentra en pleno proceso de investigación y fue caratulada como “averiguación cáusales de muerte” a la espera de que se conozcan los resultados de la autopsia.
En tanto, desde el Ejército Argentino iniciaron las actuaciones administrativas internas. Por su parte, autoridades militares locales se pusieron a disposición de la justicia para colaborar con los requerimientos necesarios.
Pereira era un hombre de amplia trayectoria en el Ejército, destacado por su disciplina y calidad humana. Además, poseía un perfil público reconocido fuera de los cuarteles como un atleta de élite: participó en numerosas maratones de carácter regional, nacional e internacional y obtuvo importantes premios representando a la provincia de Corrientes. Carlos Presti, ministro de Defensa, se expresó tras conocerse la noticia: “Asumí para hacerme cargo de estas tristes situaciones, que nos afectan como sociedad y de forma muy particular a las FFAA. Mis condolencias y mi oración a la Familia”.
El fallecimiento de Pereira ocurre apenas unas horas después de otra tragedia que enluta al Ejército Argentino. El martes, Rodrigo Gómez, de 21 años, quien cumplía tareas de vigilancia como soldado en la Quinta de Olivos, fue hallado sin vida en uno de los puestos internos. Gómez se encontraba apostado en el perímetro de la Quinta Presidencial de Olivos y se quitó la vida con su arma reglamentaria.
Según trascendió, el joven soldado dejó una carta escrita de puño y letra, dirigido a su familia y a compañeros de trabajo, en la cual hacía referencia a una importante deuda económica. Una de las claves de la investigación, según lo publicado por Infobae, es que el efectivo mantenía un perfil crediticio con compromisos cercanos a los dos millones de pesos con bancos y financieras, un monto que la Justicia considera esencial para entender su decisión final.
Por disposición del Juzgado Federal interviniente, a cargo de la jueza Sandra Arroyo Salgado, se ordenó la intervención de las distintas áreas especializadas de las fuerzas federales para llevar adelante las pericias correspondientes. Las medidas incluyen el relevamiento del lugar, la toma de testimonios y el análisis de toda la información disponible que permita reconstruir lo ocurrido y determinar las circunstancias en las que se produjo el hecho.