viernes 29 de marzo de 2024
fallo unánime de la cámara penal N° 2

Reyerta fatal: para el Tribunal, los acusados actuaron en legítima defensa

Claudio Olivera fue condenado a 12 años de prisión. Hernán Chanampa deberá cumplir 2 años y 6 meses de prisión en suspenso. Gabriela Argañaraz fue absuelta.

Por Redacción El Ancasti

En un fallo unánime, el Tribunal de la Cámara Penal N° 2 condenó a Claudio Mauricio Olivera y a Hernán Ulises Chanampa por la reyerta del barrio Virgen Niña, en el que fue asesinado Luis Américo Garribia. Gabriela Soledad Argañaraz fue absuelta por los dos hechos que llegaba incriminada.

Olivera, quien enfrentaba una imputación que le podría haber valido la prisión perpetua -homicidio calificado por alevosía-, fue condenado a 12 años. El Tribunal, compuesto por los jueces Luis Guillamondegui, Fabricio Gershani Quesada y Rodrigo Morabito, morigeró la acusación y entendió que actuó con "exceso de la legítima defensa". También fue encontrado culpable de "homicidio en grado de tentativa" por el ataque contra Nicolás Garribia y por "lesiones graves" y "lesiones leves" provocadas a Brian Luján, el querellante en el caso.

El hombre es el único que llegó detenido al juicio y nunca estuvo en la sala de audiencias. A raíz del coronavirus siguió las alternativas del juicio desde el Servicio Penitenciario Provincial. Ayer fue vía llamada telefónica ya que había inconvenientes con la conexión de Internet desde el penal.

Su pareja, Argañaraz, fue absuelta en los dos hechos. En el más grave, el intento de homicidio de Nicolás Garribia, fue absuelta por el beneficio de la duda. En tanto que por las lesiones contra Brian Luján fue absuelta porque los jueces consideraron que medió legítima defensa.

Chanampa fue condenado pero no irá a prisión. Lo declararon culpable como partícipe necesario del delito de "lesiones graves" por el ataque contra Nicolás Garribia. Fue sentenciado a una pena de prisión en suspenso de 2 años y 6 meses y lo absolvieron por las lesiones leves contra Luján.

"A mí no me quedó otra opción que defenderme. Sentí mucho miedo" (Claudio Olivera)

El fallo dejó conformes a los tres sospechosos, quienes se abrazaron con familiares luego de escuchar el veredicto.
Antes de conocerse la sentencia, los imputados tuvieron la posibilidad de emitir la última palabra.

"Lamento mucho lo que sucedió con la familia Garribia. Él único culpable de todo es Luján. Soy inocente", expresó Chanampa, que fue defendido por Luis Nicolás Gandini, quien durante el alegato había pedido la absolución porque entendía que su cliente "se defendió de un ataque ilegítimo".

A su turno, desde el penal mientras era escuchado atentamente por Orlando Barrientos, su defensor, Olivera expresó: "Nunca tuve intención de hacerle daño. A mí no me quedó otra opción que defenderme. Sentí mucho miedo. Además de haber recibido golpes, sentí puñaladas por la espalda. ¿Qué pueden sentir algunos? Antes que me condenen quiero que se pongan un minuto en mi lugar".

"Quiero que se termine todo de una vez. Esto me arruinó la vida, me la destruyó" (Gabriela Argañaraz)

"Confío en el criterio de ustedes para hacer justicia", le dijo Argañaraz al Tribunal. "Me arruinó la vida. Me la destruyó. Siento mucho lo que pasó. Quiero que se termine esto de una vez. Fue tan injusto lo que hizo Luján y el hermano de Garribia", dijo la mujer que tenía como abogado a Roberto Mazzucco.

El hecho 
La reyerta fatal del barrio Virgen Niña ocurrió el 16 de junio de 2018. El origen de la trifulca se dio cuando Luján tuvo una discusión con Olivera, quien le terminó fracturando el tabique nasal.
Luján se marchó y buscó a los hermanos Garribia para vengarse y los tres irrumpieron en la casa de Olivera, en donde se trenzaron en lucha con la pareja de éste, Argañaraz, y Chanampa.

Luis Garribia murió por una puñalada, en tanto que su hermano, que también fue apuñalado, fue dado de alta y falleció una semana después por leucemia.

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